Después de todo esto, la palabra del Señor fue dirigida a Abrán en una visión. Dijo: 'No temas, Abrán, yo soy tu escudo. Tu recompensa será muy grande'.
Números 24:4 - Biblia Martin Nieto oráculo del que oye la palabra de Dios. Ve lo que el todopoderoso le hace ver, cae en éxtasis y se abren sus ojos. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Dijo el que oyó los dichos de Dios, El que vio la visión del Omnipotente; Caído, pero abiertos los ojos: Biblia Nueva Traducción Viviente el mensaje del que oye las palabras de Dios, del que ve una visión que proviene del Todopoderoso, y se inclina con los ojos abiertos: Biblia Católica (Latinoamericana) oráculo del que escucha las palabras de Dios,
que ve lo que el Dios de la Estepa le da a ver,
que se postra, y Dios le abre los ojos. La Biblia Textual 3a Edicion Oráculo del que oye los dichos de Dios, Que contempla la visión de ’El- Shadday, Caído, pero con los ojos abiertos: Biblia Serafín de Ausejo 1975 oráculo del que oye las palabras de Dios, del que ve la visión de Sadday, del que, al caer, se le abren los ojos. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Dijo el que oyó las palabras de Dios, el que vio la visión del Todopoderoso, cayendo en éxtasis, pero con sus ojos abiertos: |
Después de todo esto, la palabra del Señor fue dirigida a Abrán en una visión. Dijo: 'No temas, Abrán, yo soy tu escudo. Tu recompensa será muy grande'.
Cuando el sol estaba ya para ponerse, cayó sobre Abrán un sueño profundo y le envolvió una oscuridad terrorífica.
'He visto a todo Israel disperso por los montes como rebaño sin pastor. Y el Señor decía: Éstos no tienen dueño. Que cada uno vuelva en paz a su casa'.
semejante al arco iris que aparece en las nubes en un día de lluvia; tal era el fulgor que despedía. Esta visión era como la imagen de la gloria del Señor. A su vista yo caí rostro en tierra y oí una voz que hablaba.
El Señor les dijo: 'Escuchad mis palabras: Cuando hay entre vosotros un profeta del Señor, yo me doy a conocer a él en visión y le hablo en sueños.
Dios se apareció a Balaán durante la noche y le dijo: '¿No han venido estas gentes a llamarte? Levántate y vete con ellos, pero no hagas más que lo que yo te diga'.
El Señor abrió los ojos de Balaán y vio al ángel del Señor apostado en el camino con la espada desenvainada en la mano. Balaán se inclinó y se postró en tierra.
Y pronunció esta profecía: 'Oráculo de Balaán, hijo de Beor, oráculo del hombre de mirada penetrante;
Tuvo hambre y quiso comer algo; y mientras le preparaban de comer, tuvo un éxtasis:
Pedro seguía pensando en la visión; el Espíritu Santo le dijo: 'Ahí te buscan tres hombres;
Cuando volví a Jerusalén, estando yo orando en el templo, fui arrebatado en éxtasis
Caí en éxtasis el día del Señor y oí detrás de mí una voz potente como de trompeta,
Al verle, caí a sus pies como muerto; pero él me tocó con su mano derecha, y me dijo: 'No tengas miedo; soy yo, el primero y el último, el viviente;
Allí se despojó también él de sus vestidos y profetizó en presencia de Samuel; después cayó desnudo en tierra y estuvo así todo el día y toda la noche. De ahí viene el dicho: '¿También Saúl entre los profetas?'.