Ocozías se cayó por una ventana del piso superior en Samaría, resultando gravemente herido. Y envió mensajeros a consultar a Belcebú, dios de Ecrón, si se curaría de sus heridas.
Mateo 10:25 - Biblia Martin Nieto Al discípulo le basta ser como su maestro, y al criado como su amo. Si al amo de la casa le han llamado Belcebú, ¡qué no dirán de los de la casa! Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Bástale al discípulo ser como su maestro, y al siervo como su señor. Si al padre de familia llamaron Beelzebú, ¿cuánto más a los de su casa? Biblia Nueva Traducción Viviente Los alumnos deben parecerse a su maestro, y los esclavos deben parecerse a su amo. Si a mí, el amo de la casa, me han llamado príncipe de los demonios, a los miembros de mi casa los llamarán con nombres todavía peores. Biblia Católica (Latinoamericana) Ya es mucho si el discípulo llega a ser como su maestro y el sirviente como su patrón. Si al dueño de casa lo han llamado demonio, ¡qué no dirán de los demás de la familia! La Biblia Textual 3a Edicion Basta al discípulo que llegue a ser como su maestro, y al siervo como su señor. Si al amo de la casa llamaron Beelzebul,° ¡cuánto más a los de su casa! Biblia Serafín de Ausejo 1975 Ya es bastante que el discípulo llegue a ser como su maestro, y el esclavo como su señor. Si al señor de la casa lo han llamado Beelzebul, ¡cuánto más a los que viven con él! Biblia Reina Valera Gómez (2023) Bástale al discípulo ser como su maestro, y al siervo como su señor. Si al padre de familia llamaron Belcebú, ¿cuánto más a los de su casa? |
Ocozías se cayó por una ventana del piso superior en Samaría, resultando gravemente herido. Y envió mensajeros a consultar a Belcebú, dios de Ecrón, si se curaría de sus heridas.
Pero los fariseos, al oírlo, dijeron: 'Éste echa los demonios con el poder de Belcebú, príncipe de los demonios'.
Si yo echo los demonios con el poder de Belcebú, ¿con qué poder lo echan vuestros hijos? Por eso ellos mismos serán vuestros jueces.
Pero los fariseos decían: 'Echa a los demonios con el poder del príncipe de los demonios'.
Ellos contestaron: '¡Podemos!'. Jesús les dijo: 'Beberéis el cáliz que yo beberé y seréis bautizados con el bautismo con el que yo seré bautizado,
Los maestros de la ley, que habían venido de Jerusalén, decían: '¡Tiene a Belcebú!'; y también: '¡Echa a los demonios con el poder del príncipe de los demonios!'.
Pero algunos dijeron: 'Éste echa a los demonios con el poder de Belcebú, príncipe de los demonios'.
Si Satanás se divide contra sí mismo, ¿cómo podrá subsistir su reino? ¿Por qué decís que yo echo los demonios con el poder de Belcebú?
Si yo echo los demonios con el poder de Belcebú, ¿con qué poder los echan vuestros hijos? Por eso, ellos mismos serán vuestros jueces.
Los judíos le replicaron: 'Con razón decimos que eres samaritano y que estás endemoniado'.
Los judíos le dijeron: 'Ahora estamos seguros de que estás endemoniado. Abrahán y los profetas murieron, y tú dices: El que guarde mi palabra nunca morirá.