Lucas 9:29 - Biblia Martin Nieto Mientras él oraba, cambió el aspecto de su rostro y sus vestidos se volvieron de una blancura resplandeciente. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Y entre tanto que oraba, la apariencia de su rostro se hizo otra, y su vestido blanco y resplandeciente. Biblia Nueva Traducción Viviente Y mientras oraba, la apariencia de su rostro se transformó y su ropa se volvió blanca resplandeciente. Biblia Católica (Latinoamericana) Y mientras estaba orando, su cara cambió de aspecto y su ropa se volvió de una blancura fulgurante. La Biblia Textual 3a Edicion Y mientras oraba,° la apariencia de su rostro se volvió diferente, y su vestido, blanco resplandeciente. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Y mientras estaba orando, el aspecto de su rostro se transformó y sus vestidos se volvieron de una blancura deslumbrante. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y entre tanto que oraba, la apariencia de su rostro se hizo otra, y su vestidura se hizo blanca y resplandeciente. |
Creció ante él como un pimpollo, como raíz en tierra seca. Sin gracia ni belleza para atraer la mirada, sin aspecto digno de complacencia.
Y se transfiguró ante ellos. Su rostro brilló como el sol y sus vestiduras se volvieron blancas como la luz.
Después de esto se apareció con una figura distinta a dos de ellos en el camino, cuando iban al campo.
Después de bautizar Juan al pueblo y a Jesús, aconteció que, mientras Jesús estaba orando, se abrió el cielo,
Por aquellos días fue Jesús a la montaña a orar, y pasó la noche orando a Dios.
Un día que Jesús estaba orando en un lugar retirado y sus discípulos se encontraban con él, les preguntó: '¿Quién dice la gente que soy yo?'.
Dos hombres, de improviso, se pusieron a hablar con él. Eran Moisés y Elías,
Y aquel que es la Palabra / se hizo carne, / y habitó entre nosotros, / y nosotros vimos su gloria, / gloria cual de unigénito / venido del Padre, / lleno de gracia y de verdad. /
Entonces todos los que estaban sentados en el tribunal clavaron sus ojos en él y vieron su rostro como el rostro de un ángel.
Vi un gran trono blanco y al que estaba sentado sobre él. El cielo y la tierra huyeron de su presencia, sin que se encontrase su lugar.