Hasta que sobre nosotros se derrame el espíritu venido de lo alto: entonces el desierto se trocará en vergel y el vergel se cambiará en selva.
Lucas 24:49 - Biblia Martin Nieto Sabed que voy a enviar lo que os ha prometido mi Padre. Por vuestra parte quedaos en la ciudad hasta que seáis revestidos de la fuerza de lo alto'. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 He aquí, yo enviaré la promesa de mi Padre sobre vosotros; pero quedaos vosotros en la ciudad de Jerusalén, hasta que seáis investidos de poder desde lo alto. Biblia Nueva Traducción Viviente »Ahora enviaré al Espíritu Santo, tal como prometió mi Padre; pero quédense aquí en la ciudad hasta que el Espíritu Santo venga y los llene con poder del cielo». Biblia Católica (Latinoamericana) Ahora yo voy a enviar sobre ustedes lo que mi Padre prometió. Permanezcan, pues, en la ciudad hasta que sean revestidos de la fuerza que viene de arriba. La Biblia Textual 3a Edicion He aquí Yo envío la promesa de mi Padre° sobre vosotros, así que vosotros permaneced° en la ciudad° hasta que seáis investidos de poder desde lo alto. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Y mirad: yo voy a enviar sobre vosotros lo prometido por mi Padre. Vosotros, pues, permaneced en la ciudad hasta que seáis revestidos de fuerza desde lo alto'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y he aquí, yo enviaré sobre vosotros la promesa de mi Padre: mas vosotros quedaos en la ciudad de Jerusalén hasta que seáis investidos con poder de lo alto. |
Hasta que sobre nosotros se derrame el espíritu venido de lo alto: entonces el desierto se trocará en vergel y el vergel se cambiará en selva.
pero el defensor, el Espíritu Santo, el que el Padre enviará en mi nombre, él os lo enseñará todo y os recordará todo lo que os he dicho'.
Cuando venga el defensor, que yo os enviaré de parte del Padre, el Espíritu de la verdad, que procede del Padre, él dará testimonio de mí.
Una vez que estaba comiendo con ellos les mandó que no saliesen de Jerusalén, sino que aguardasen la promesa del Padre, de la que os hablé;
pero recibiréis la fuerza del Espíritu Santo, que vendrá sobre vosotros para que seáis mis testigos en Jerusalén, en toda Judea, en Samaría y hasta los confines de la tierra'.
Llegaron a Misia e intentaron entrar en Bitinia, pero el Espíritu de Jesús no se lo permitió.