El fogón, de dos metros de altura, y de su ángulo emergían cuatro cuernos.
Levítico 9:9 - Biblia Martin Nieto Sus hijos le presentaron la sangre, y él, mojando su dedo, untó con ella los cuernos del altar, derramando la restante al pie del mismo. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Y los hijos de Aarón le trajeron la sangre; y él mojó su dedo en la sangre, y puso de ella sobre los cuernos del altar, y derramó el resto de la sangre al pie del altar. Biblia Nueva Traducción Viviente Entonces sus hijos le llevaron la sangre, él mojó su dedo en ella y la puso en los cuernos del altar, y después derramó el resto de la sangre al pie del altar. Biblia Católica (Latinoamericana) Los hijos de Aarón le presentaron la sangre, y él, mojando su dedo en la sangre, untó con ella los cuernos del altar y derramó el resto de la sangre al pie del altar. La Biblia Textual 3a Edicion Los hijos de Aarón le acercaron la sangre, y mojando su dedo en la sangre, tocó los cuernos del altar, y el resto de la sangre la derramó al pie del altar. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Los hijos de Aarón le presentaron la sangre, mojó su dedo en la sangre, la puso en los cuernos del altar y derramó la restante al pie del mismo. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y los hijos de Aarón le trajeron la sangre; y él mojó su dedo en la sangre, y puso sobre los cuernos del altar, y derramó la demás sangre al pie del altar; |
El fogón, de dos metros de altura, y de su ángulo emergían cuatro cuernos.
Tomarás de su sangre y rociarás los cuatro cuernos del altar, los cuatro ángeles del zócalo y el bordillo que rodea la base. Ésta será la purificación del altar y su expiación.
Una vez fuera, irá al altar que está delante del Señor y hará sobre él el rito de absolución; tomará sangre del novillo y del macho cabrío, untará con ella los cuernos del altar todo alrededor
El sacerdote tomará con su dedo de la sangre de la víctima, untará con ella los cuernos del altar de los holocaustos y derramará toda la sangre restante al pie del mismo altar.
El sacerdote tomará con su dedo de la sangre, untará con ella los cuernos del altar de los holocaustos y derramará toda la sangre restante al pie del altar.
Moisés lo inmoló y, mojando sus dedos en la sangre, untó con ella los cuernos del altar todo alrededor y lo purificó. Luego derramó la sangre al pie del altar y lo consagró haciendo sobre él el rito de absolución.
Quemó luego sobre el altar las grasas de la víctima, los riñones y la sabanilla del hígado, como el Señor había ordenado a Moisés;
Aarón inmoló a continuación el holocausto, sus hijos le presentaron la sangre y él la derramó en torno del altar.
Finalmente, inmoló el toro y el carnero ofrecidos por el pueblo en sacrificio de reconciliación; sus hijos le presentaron la sangre, y él la derramó en torno del altar.
Convenía, en efecto, que aquel por quien y para quien todo fue hecho, queriendo llevar a la gloria un gran número de hijos, hiciese perfecto, mediante los sufrimientos, al jefe que debía guiarlos a la salvación.