el pan que le da fuerzas, y el vino que le alegra el corazón y hace brillar su rostro más que el mismo aceite.
Jueces 9:13 - Biblia Martin Nieto La vid les respondió: ¿Voy a renunciar a mi mosto, alegría de Dios y de los hombres, para venir a balancearme sobre los árboles? Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Y la vid les respondió: ¿He de dejar mi mosto, que alegra a Dios y a los hombres, para ir a ser grande sobre los árboles? Biblia Nueva Traducción Viviente Pero la vid también se negó diciendo: “¿Dejaría yo de producir el vino que alegra a Dios y a la gente, solo para mecerme por encima de los árboles?”. Biblia Católica (Latinoamericana) Pero la vid les respondió: ¿Tendré que renunciar a mi uva, que tanto alegra a los dioses y a los hombres, para ir a balancearme por encima de los árboles? La Biblia Textual 3a Edicion Y la vid les respondió: ¿Dejaré mi mosto, Que alegra a ’Elohim y a los hombres, Para mecerme por encima de los árboles? Biblia Serafín de Ausejo 1975 Pero la vid les respondió: '¿Voy a renunciar a mi mosto, que alegra a los dioses y a los hombres, para ir a mecerme sobre los árboles?'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y la vid les respondió: ¿He de dejar mi mosto, que alegra a Dios y a los hombres, por ir a ser grande sobre los árboles? |
el pan que le da fuerzas, y el vino que le alegra el corazón y hace brillar su rostro más que el mismo aceite.
Dad los licores al que va a perecer, el vino al corazón lleno de amargura.
Para el placer se hacen banquetes, y el vino alegra la vida, y el dinero todo lo arregla.
Resolví en mi corazón regalar mi cuerpo con el vino, guiando mi corazón con la sabiduría, y entregarme a la necedad para ver dónde está la felicidad de los hombres y lo que hacen debajo de los cielos durante los días de su vida.
y cuatro litros de vino, como ofrenda quemada de olor agradable al Señor.
Añadirás una ofrenda de vino, a razón de dos litros por cordero, además del holocausto y el sacrificio.
y dos litros y medio de vino como ofrenda de olor agradable al Señor.
Por fin, los árboles dijeron a la zarza espinosa: Ven tú, reina sobre nosotros.