No temo a los hombres sin cuento que por doquier se apostan contra mí.
Jueces 4:21 - Biblia Martin Nieto Pero Yael, mujer de Jéber, tomó un clavo de la tienda y un martillo, y se acercó silenciosamente a él y le clavó en la sien el clavo, que llegó hasta la tierra. Sísara estaba profundamente dormido, agotado de cansancio, y murió. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Pero Jael mujer de Heber tomó una estaca de la tienda, y poniendo un mazo en su mano, se le acercó calladamente y le metió la estaca por las sienes, y la enclavó en la tierra, pues él estaba cargado de sueño y cansado; y así murió. Biblia Nueva Traducción Viviente Pero cuando Sísara se durmió por tanto agotamiento, Jael se le acercó en silencio con un martillo y una estaca en la mano. Entonces le clavó la estaca en la sien hasta que quedó clavada en el suelo, y así murió. Biblia Católica (Latinoamericana) Pero Yael, mujer de Jeber, tomó una de las estacas de la tienda junto con un martillo, y acercándose suavemente por detrás de él le enterró la estaca en la sien con tal fuerza que se clavó en la tierra. El dormía profundamente porque estaba muy cansado, y así fue como murió. La Biblia Textual 3a Edicion Pero Jael, mujer de Heber, tomó una estaca de la tienda y asiendo un mazo en su mano, fue calladamente hacia él, y le clavó la estaca en la sien, la cual penetró hasta la tierra, pues él estaba cansado y dormía profundamente. Y así murió. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Tomó luego Yael, esposa de Jéber, una clavija de fijar la tienda, tomó también en la mano un martillo, se acercó sigilosamente a él y le hincó en la sien la clavija, que penetró hasta clavarse en la tierra. Él, que estaba profundamente dormido y fatigado, murió. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y Jael, esposa de Heber, tomó una estaca de la tienda, y poniendo un mazo en su mano, vino a él calladamente, y le metió la estaca por las sienes, y lo enclavó en la tierra, pues él estaba cargado de sueño y cansado; y así murió. |
No temo a los hombres sin cuento que por doquier se apostan contra mí.
Pues dice la Escritura: Inutilizaré la sabiduría de los sabios y anularé la inteligencia de los inteligentes.
Dios eligió lo que el mundo tiene por necio para humillar a los sabios; lo débil, para humillar a los fuertes;
Vio cerca una quijada de asno fresca, la agarró y mató a mil hombres:
Entonces Ehud, con la mano izquierda, tomó el puñal que llevaba al lado derecho y se lo metió en el vientre.
Después de él, fue juez Sangar, hijo de Anat. Él derrotó a los filisteos, en número de seiscientos hombres, con una aguijada de bueyes. También él salvó a Israel.
Sísara le dijo: 'Quédate a la puerta de la tienda, y si viene alguien preguntando: ¿Hay aquí algún hombre?, responderás: No'.
Entre tanto llegó Barac, que perseguía a Sísara. Yael salió a su encuentro y le dijo: 'Ven, y te enseñaré al hombre a quien buscas'. Entró con ella. Sísara yacía muerto, con el clavo en la sien.
Débora contestó: 'Iré contigo; pero el camino que vas a recorrer no será gloria tuya, porque en manos de una mujer entregará el Señor a Sísara'. Débora se puso en camino y, con Barac, se dirigió a Cades.
Y le dijo: '¿Te has creído que soy un perro, para venir contra mí con un cayado?'. Luego maldijo a David por sus dioses,