Bíobla ar líne

Fógraí


An Bíobla ar fad Sean-Tiomna Tiomna Nua




Isaías 4:1 - Biblia Martin Nieto

Aquel día siete mujeres se disputarán a un hombre y le dirán: Nosotras comeremos nuestro pan y nuestro vestido vestiremos; deja sólo que llevemos tu nombre, quítanos nuestra infamia.

Féach an chaibidil
Taispeáin Interlinear Bible

Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

Echarán mano de un hombre siete mujeres en aquel tiempo, diciendo: Nosotras comeremos de nuestro pan, y nos vestiremos de nuestras ropas; solamente permítenos llevar tu nombre, quita nuestro oprobio.

Féach an chaibidil

Biblia Nueva Traducción Viviente

En aquel día quedarán tan pocos hombres que siete mujeres pelearán por uno solo y le dirán: «¡Deja que todas nos casemos contigo! Nos ocuparemos de nuestra propia comida y ropa. Solo déjanos tomar tu apellido, para que no se burlen de nosotras diciendo que somos solteronas».

Féach an chaibidil

Biblia Católica (Latinoamericana)

Siete mujeres se pelearán por un solo hombre en ese día, y le suplicarán: 'Nos alimentaremos por nuestra cuenta, y lo mismo nos vestiremos nosotras, permítenos solamente llevar tu apellido, para salvar así nuestra honra.

Féach an chaibidil

La Biblia Textual 3a Edicion

Siete mujeres echarán mano de un mismo varón aquel día, diciendo: Comeremos nuestro pan y vestiremos nuestras ropas, ¡Sólo danos tu apellido y quita nuestra deshonra!°

Féach an chaibidil

Biblia Serafín de Ausejo 1975

Siete mujeres se asirán de un hombre, aquel día, diciendo: 'Nuestro pan comeremos, nuestro vestido vestiremos; déjanos sólo llevar tu nombre, quita nuestro oprobio'.

Féach an chaibidil

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

En aquel tiempo siete mujeres echarán mano de un hombre, diciendo: Nosotras comeremos de nuestro pan, y nos vestiremos de nuestras ropas; solamente permítenos ser llamadas por tu nombre, y así quitar nuestro oprobio.

Féach an chaibidil
Aistriúcháin eile



Isaías 4:1
15 Tagairtí Cros  

Concibió, pues, y dio a luz un hijo, y dijo: 'Dios me ha quitado la afrenta',


Y Mical, hija de Saúl, no tuvo hijos hasta el día de su muerte.


Sucederá aquel día que el resto de Israel y los supervivientes de la casa de Jacob dejarán de apoyarse en quien los hiere, y se apoyarán con lealtad en el Señor, el Santo de Israel.


Haré a los hombres más escasos que el oro, a los mortales más raros que el oro de Ofir.


Aquel día el hombre mirará a su creador, y sus ojos se volverán al Santo de Israel.


Los ojos soberbios del hombre serán abatidos, y la arrogancia de los mortales se doblegará; sólo el Señor será exaltado el día aquel.


La arrogancia humana será humillada, el orgullo del hombre será abatido; sólo el Señor será exaltado el día aquel.


Y cada cual agarrará a su hermano en la casa de su padre: Tú tienes manto, sé nuestro jefe; toma en tus manos estas ruinas.


No temas, pues no tendrás ya que avergonzarte; no te sonrojes, pues no serás ya confundida; olvidarás la afrenta de tu juventud y no te acordarás del oprobio de tu viudez.


Sus viudas son más numerosas que la arena del mar. Sobre las madres de jóvenes guerreros he traído, en pleno día, al devastador; hago caer sobre ellas de repente terror y espanto.


'El Señor ha hecho esto conmigo y me ha librado de la vergüenza ante la gente'.


Serán días de castigo, en los que se cumplirá todo lo que está escrito.


Pues bien, a estos tales exhortamos y amonestamos en nombre de Jesucristo, el Señor, a trabajar en paz y a ganarse el pan que comen.


Su rival la humillaba y se burlaba de ella porque el Señor la había hecho estéril.