y, con todo su ganado y todo lo que había adquirido en Padán Arán, se puso en camino hacia Isaac, su padre, a la tierra de Canaán.
Génesis 32:6 - Biblia Martin Nieto Tengo vacas, asnos y ovejas, esclavos y esclavas, y he querido decírselo a mi señor para hallar gracia a sus ojos'. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Y los mensajeros volvieron a Jacob, diciendo: Vinimos a tu hermano Esaú, y él también viene a recibirte, y cuatrocientos hombres con él. Biblia Nueva Traducción Viviente Después de transmitir el mensaje, los mensajeros regresaron y le informaron a Jacob: «Nos encontramos con su hermano Esaú y ya viene en camino a su encuentro, ¡con un ejército de cuatrocientos hombres!». Biblia Católica (Latinoamericana) He adquirido bueyes, burros, rebaños, mozos y sirvientas. Y ahora quiero avisarte, esperando que me recibirás bien. La Biblia Textual 3a Edicion Y los mensajeros volvieron a Jacob diciendo: Fuimos a tu hermano Esaú, y también él viene a tu encuentro con cuatrocientos hombres. Biblia Serafín de Ausejo 1975 He adquirido bueyes y asnos, ganado menor, siervos y siervas, y he enviado a notificarlo a mi señor, para hallar gracia ante tus ojos''. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y los mensajeros volvieron a Jacob, diciendo: Vinimos a tu hermano Esaú, y él también viene a recibirte, y cuatrocientos hombres con él. |
y, con todo su ganado y todo lo que había adquirido en Padán Arán, se puso en camino hacia Isaac, su padre, a la tierra de Canaán.
yo no soy digno de todos tus favores y de todo el bien que has hecho a tu siervo, pues pasé este Jordán sólo con mi bastón y ahora puedo formar dos campamentos.
Los mensajeros volvieron a Jacob diciendo: 'Hemos ido a tu hermano, y él mismo viene a tu encuentro con cuatrocientos hombres'.
Jacob tuvo gran temor y se llenó de angustia. Dividió en dos campamentos a la gente que estaba con él y también las ovejas, las vacas y los camellos.
Jacob alzó los ojos y vio que venía Esaú con cuatrocientos hombres. Repartió los niños entre Lía y Raquel y las dos esclavas.
Esaú dijo: 'Por lo menos voy a dejar contigo algunos de mis hombres'. Jacob respondió: '¿Y para qué? ¡Basta que yo haya hallado gracia a los ojos de mi señor!'.
Esaú preguntó: '¿Qué significa todo ese ganado que he encontrado?'. Jacob respondió: 'Es para hallar gracia a los ojos de mi señor'.
Siquén dijo al padre de Dina y a sus hermanos: 'Halle yo gracia a vuestros ojos y os daré lo que me pidáis.
Ellos respondieron: 'Tú nos has salvado la vida; hallemos ahora gracia a los ojos de nuestro señor y seremos siervos del Faraón'.
Como el hombre que huye del león, y le acosa un oso; entra en casa, pone su mano sobre la pared y le muerde una serpiente.
Rut dijo: 'Has sido muy amable conmigo, señor; me has consolado y me has hablado al corazón, aunque yo no soy ni siquiera como una de tus criadas'.
Un día Rut, la moabita, dijo a su suegra: 'Déjame ir a espigar al campo del que me lo permita'. Ella le respondió: 'Anda, hija mía'.
Ella dijo: 'Que tu sierva alcance tu favor'. La mujer se marchó, comió y bebió, y ya no parecía la de antes.