Éxodo 33:4 - Biblia Martin Nieto El pueblo oyó estas duras palabras e hizo duelo; nadie se vistió de gala. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Y oyendo el pueblo esta mala noticia, vistieron luto, y ninguno se puso sus atavíos. Biblia Nueva Traducción Viviente Cuando los israelitas oyeron estas palabras tan duras, hicieron duelo y dejaron de usar joyas y ropa fina. Biblia Católica (Latinoamericana) El pueblo escuchó esta advertencia; ninguno se puso su traje de fiesta; más bien hicieron duelo. La Biblia Textual 3a Edicion Cuando el pueblo oyó esta mala noticia, prorrumpió en llanto y ninguno se vistió sus atavíos. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Al oír el pueblo esta mala noticia, hizo duelo y nadie se vistió sus galas. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y oyendo el pueblo esta mala noticia, hicieron duelo, y ninguno se puso sus atavíos: |
Cuando Ajab oyó aquellas palabras, rasgó sus vestiduras, se vistió de saco y ayunó. Se acostaba con el cilicio y andaba muy afligido.
Cuando el rey Ezequías oyó esto, rasgó sus vestiduras, se cubrió de saco y entró en el templo del Señor.
Al oír esto, rasgué mis vestiduras y mi manto, me rasuré los pelos de la cabeza y la barba y me senté abrumado.
Entonces Job se levantó, rasgó sus vestiduras y se rapó la cabeza. Luego cayó en tierra, adoró y dijo:
Al levantar sus ojos desde lejos no lo reconocieron, y se pusieron a llorar a grandes voces, rasgando cada uno su manto y esparciendo polvo sobre sus cabezas.
Temblad, despreocupadas; estremeceos, confiadas; despojaos, desnudaos, ceñíos la cintura,
Suspira en silencio, no hagas luto; cíñete el turbante a tu cabeza, ponte en los pies las sandalias; no te cubras la barba, no comas el pan del duelo'.
Llevaréis vuestro turbante a la cabeza y las sandalias en los pies; no os lamentaréis ni lloraréis, sino que os consumiréis a causa de vuestras iniquidades y os lamentaréis unos con otros.
Bajarán de sus tronos todos los príncipes del mar, se quitarán sus mantos y se despojarán de sus vestiduras recamadas; se vestirán de luto, se sentarán en tierra, sufrirán incesantes temblores y estarán consternados por ti.
Y no claman a mí en su corazón cuando se lamentan en sus camas; se preocupan del trigo y del vino y se rebelan contra mí.
Moisés dijo a Aarón, a Eleazar e Itamar, hijos de Aarón: 'No os despelucéis ni rasguéis vuestras vestiduras; así no moriréis ni se encenderá la ira divina contra toda la comunidad; vuestros hermanos, toda la casa de Israel, son los que deben llorar a los que el Señor ha destruido por el fuego.
El rey de Nínive, al enterarse, se levantó de su trono, se quitó el manto, se vistió de saco y se sentó en el suelo.
y para preguntar a los sacerdotes del templo del Señor todopoderoso y a los profetas lo siguiente: '¿Debo continuar guardando luto y ayunando el mes quinto como lo vengo haciendo tantos años?'.
'Di a todo el pueblo de la tierra y a los sacerdotes: Cuando ayunabais y guardabais luto el quinto y el séptimo mes, ¿ayunabais por amor mío?
Entonces toda la comunidad empezó a gritar, el pueblo se pasó la noche llorando
Moisés contó todo esto a los israelitas, y el pueblo hizo grandes manifestaciones de duelo.
Los hijos de Jeconías no se alegraron con las gentes de Bet Semes cuando vieron el arca del Señor, y el Señor hirió a setenta hombres de entre ellos. El pueblo hizo gran duelo porque el Señor los había castigado tan duramente.