Yo haré de ti un gran pueblo; te bendeciré y engrandeceré tu nombre. Tú serás una bendición:
Éxodo 32:10 - Biblia Martin Nieto Déjame que se encienda mi ira contra ellos y los aniquile, mientras que de ti haré un gran pueblo'. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Ahora, pues, déjame que se encienda mi ira en ellos, y los consuma; y de ti yo haré una nación grande. Biblia Nueva Traducción Viviente Ahora quítate de en medio, para que mi ira feroz pueda encenderse contra ellos y destruirlos. Después, Moisés, haré de ti una gran nación. Biblia Católica (Latinoamericana) Ahora, pues, deja que estalle mi furor contra ellos. Voy a exterminarlos, mientras que de ti yo haré nacer un gran pueblo. La Biblia Textual 3a Edicion Deja ahora que se encienda mi ira contra ellos, y los consumiré, y haré de ti una nación grande. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Ahora, déjame que se encienda mi ira contra ellos y los extermine; pero yo haré de ti una gran nación'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Ahora pues, déjame que se encienda mi furor contra ellos, y los consuma: y a ti yo te pondré sobre gran gente. |
Yo haré de ti un gran pueblo; te bendeciré y engrandeceré tu nombre. Tú serás una bendición:
Dios pensaba ya aniquilarlos; pero Moisés, su elegido, se interpuso ante él y le hizo apartar su ira destructora.
Si prestas dinero a alguno de mi pueblo, al pobre, vecino tuyo, no serás usurero con él, exigiéndole intereses.
Moisés aplacó al Señor, su Dios, diciendo: '¿Por qué, oh Señor, se ha de encender tu ira contra tu pueblo, al que sacaste de Egipto con gran fuerza y con mano poderosa?
Al acercarse al campamento y ver el becerro y las danzas, enfurecido, tiró las tablas y las rompió al pie de la montaña.
sube a la tierra que mana leche y miel; pero yo no subiré en medio de ti, porque eres un pueblo de cabeza dura, y yo te aniquilaría por el camino'.
Y tú no intercedas en favor de este pueblo, no eleves por ellos ni súplicas ni oraciones: porque no les escucharé cuando acudan en el tiempo de su desgracia'.
El Señor me dijo: 'Aunque se presentaran ante mí Moisés y Samuel, mi alma no se inclinaría hacia este pueblo. Échalos de mi presencia, que se vayan.
Y tú no intercedas en favor de este pueblo, no eleves por ellos súplicas ni oraciones, no insistas cerca de mí, pues yo no te escucharé.
Pero el pueblo de Israel se rebeló contra mí en el desierto; no caminaron según mis preceptos, despreciaron mis leyes que dan la vida a quien las observa, y profanaron mis sábados, por lo cual decidí derramar sobre ellos mi furor en el desierto y exterminarlos.
Lo heriré de peste y lo destruiré; a ti te haré cabeza de una nación más grande y poderosa que ellos'.
'Separaos de esta comunidad, pues quiero aniquilarla en un instante'.
Cayeron sobre sus rostros y dijeron: '¡Oh, Dios, Dios del espíritu de todo viviente! ¿Ha pecado uno solo, y tú te irritas contra toda la comunidad?'.
déjame que lo destruya y borre su nombre de la tierra, y te daré una nación más fuerte y más numerosa que ese pueblo.
pues yo tenía miedo de la ira y el furor con que estaba irritado el Señor contra vosotros hasta el extremo de querer destruiros. Esta vez todavía me escuchó el Señor.
Confesaos los pecados unos a otros y rezad unos por otros, para que os curéis. La oración fervorosa del justo tiene un gran poder.