ávidos abren contra mí sus fauces, cual leones que rugen y desgarran.
Éxodo 29:13 - Biblia Martin Nieto Tomas todo el sebo que cubre las entrañas, la redecilla del hígado, los dos riñones y el sebo que los envuelve, y lo quemas sobre el altar. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Tomarás también toda la grosura que cubre los intestinos, la grosura de sobre el hígado, los dos riñones, y la grosura que está sobre ellos, y lo quemarás sobre el altar. Biblia Nueva Traducción Viviente Toma toda la grasa que rodea las vísceras, el lóbulo largo del hígado, los dos riñones junto con toda la grasa que los rodea, y quema todo sobre el altar. Biblia Católica (Latinoamericana) Sacarás todo el sebo que cubre las entrañas, el que queda junto al hígado y los dos riñones con el sebo que los envuelve, para quemarlo en el altar. La Biblia Textual 3a Edicion Tomarás también toda la grasa que cubre las entrañas, el redaño del hígado y los dos riñones con la grasa que los envuelve y lo dejarás consumir en el altar. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Luego tomarás todo el sebo que envuelve las entrañas, la membrana del hígado y los dos riñones, con el sebo que los recubre, y lo quemarás todo en el altar. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Tomarás también toda la grosura que cubre los intestinos, la grosura que está sobre el hígado, los dos riñones y la grosura que está sobre ellos, y lo quemarás sobre el altar. |
ávidos abren contra mí sus fauces, cual leones que rugen y desgarran.
No comeréis nada crudo ni cocido en agua; todo ha de ser asado al fuego: cabeza, patas y entrañas.
y lo quemas todo sobre el altar. Es un holocausto en honor del Señor, un olor agradable, un sacrificio de fuego en honor del Señor.
Tomas después el sebo del carnero, esto es, el rabo y el sebo que recubre las entrañas, la redecilla del hígado y los dos riñones con el sebo que hay sobre ellos, junto con la pierna derecha, porque es carnero de consagración.
Lo recoges luego de sus manos y lo quemas sobre el altar, sobre el holocausto, en olor agradable ante el Señor. Es un sacrificio de fuego en honor del Señor.
¿Qué me importa la multitud de vuestros sacrificios? -dice el Señor-. Estoy harto de holocaustos de carneros y de grasas de becerros; la sangre de novillos, de corderos y de machos cabríos me hastía.
La espada del Señor está llena de sangre, empapada de grasa, de sangre de corderos y de machos cabríos, de grasa de riñones de carneros. Pues el Señor va a hacer un sacrificio en Bosra, una gran matanza en el país de Edón.
No has comprado por dinero caña aromática para mí, ni me has saciado con la grasa de tus sacrificios; sólo con tus pecados me has oprimido, me has agobiado con tus iniquidades.
El sacerdote presentará la víctima en el altar, le arrancará la cabeza, que quemará sobre el altar, y exprimirá su sangre sobre la pared del altar;
Lavará con agua las entrañas y las patas, y el sacerdote lo quemará todo sobre el altar: es un holocausto, una ofrenda quemada, un perfume agradable al Señor.
El sacerdote derramará la sangre sobre el altar del Señor a la entrada de la tienda de la reunión y quemará las grasas en perfume agradable al Señor.
Luego quemará todas las grasas sobre el altar, como había hecho con las grasas del sacrificio de reconciliación. El sacerdote hará el rito de absolución por el jefe, a quien se le perdonará el pecado. d) De un hombre del pueblo.
Arrancará luego todas las grasas, como se arrancan en el sacrificio de reconciliación, y el sacerdote las quemará sobre el altar en perfume agradable al Señor. El sacerdote hará el rito de absolución sobre este hombre, que alcanzará el perdón por su pecado.
Arrancará luego todas las grasas, como se arrancan en el cordero del sacrificio de reconciliación, y el sacerdote las quemará en el altar sobre las ofrendas quemadas en honor del Señor. El sacerdote hará el rito de absolución sobre este hombre, que alcanzará el perdón de su pecado.
Serán ofrecidas todas sus grasas: la cola, la grasa que recubre las entrañas,
El sacerdote quemará las grasas sobre el altar, y el pecho será para Aarón y sus hijos.
los dos riñones, con la grasa que los envuelve y la que envuelve los lomos y la sabanilla que habrá separado del hígado y de los riñones.
Tomó todas las grasas que envuelven las entrañas, la sabanilla que recubre el hígado y los dos riñones con sus grasas, y los quemó sobre el altar.
Tomó las grasas, la cola, todas las grasas que envuelven las entrañas, la sabanilla que recubre el hígado, los dos riñones, juntamente con sus grasas, y la pierna derecha;
Quemó luego sobre el altar las grasas de la víctima, los riñones y la sabanilla del hígado, como el Señor había ordenado a Moisés;
Las grasas del toro y del carnero, la cola, la grasa que cubre las entrañas, los riñones y la sabanilla del hígado,
No aceptarás rescate por los primogénitos de las vacas, ovejas y cabras. Éstas son cosas santas; verterás su sangre sobre el altar, quemarás las grasas como ofrenda quemada de olor agradable al Señor,
Y si alguno le decía: 'Primero deben quemarse las grasas; después toma lo que quieras', respondía: 'No, dámelo ahora; si no, lo tomaré por la fuerza'.