Cuando se evaporó el rocío, apareció sobre la superficie del desierto una cosa menuda, granulada, fina, como escarcha sobre la tierra.
Éxodo 16:31 - Biblia Martin Nieto Los israelitas llamaron a este alimento maná. Era parecido a la semilla del cilantro, blanco, y su sabor como torta de miel. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Y la casa de Israel lo llamó Maná; y era como semilla de culantro, blanco, y su sabor como de hojuelas con miel. Biblia Nueva Traducción Viviente Los israelitas llamaron maná al alimento. Era blanco como la semilla de cilantro, y tenía un gusto parecido a obleas con miel. Biblia Católica (Latinoamericana) La gente de Israel llamó a este alimento: maná. Era como la semilla del cilantro, blanco, y su gusto se parecía al de una torta de miel. La Biblia Textual 3a Edicion Y la casa de Israel llamó su nombre ‘maná’; y era como granos de culantro, blanco, y su sabor era como de hojuela con miel.° Biblia Serafín de Ausejo 1975 Los israelitas le dieron el nombre de maná. Era como semilla de cilandro, blanco, y su sabor como el de una torta hecha con miel. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y la casa de Israel lo llamó Maná; y era como semilla de cilantro, blanco, y su sabor como de hojuelas con miel. |
Cuando se evaporó el rocío, apareció sobre la superficie del desierto una cosa menuda, granulada, fina, como escarcha sobre la tierra.
Los israelitas, al verla, se dijeron unos a otros: 'man hu'=¿qué es esto?', pues no sabían lo que era. Moisés les dijo: 'Éste es el pan que os da el Señor para comer.
Moisés dijo: 'Esto es lo que manda el Señor: Tomad dos litros y conservadlo para que vuestros descendientes vean el pan con que os he alimentado en el desierto, cuando os saqué de Egipto'.
Como manzano entre árboles silvestres, así es mi amado entre los jóvenes. A su sombra apetecida estoy sentada, y su fruto me es dulce al paladar.
y te ha alimentado en el desierto con el maná, desconocido para tus mayores, con el fin de humillarte y probarte para prepararte un futuro dichoso.
Te ha humillado y te ha hecho sentir hambre para alimentarte luego con el maná, desconocido de tus mayores; para que aprendieras que no sólo de pan vive el hombre, sino de todo lo que sale de la boca del Señor.