Saray dijo a Abrán: 'Tú eres el responsable de la afrenta que me hace. Yo puse a mi esclava entre tus brazos, y ella, al verse embarazada, me mira con desprecio. ¡Que el Señor juzgue entre nosotros!'.
1 Samuel 24:12 - Biblia Martin Nieto Mira, padre mío, mira la orla de tu manto en mi mano. Puesto que he cortado la orla de tu manto y no te he matado, reconoce claramente que no hay en mí maldad ni rebeldía. Yo no he pecado contra ti; tú, por el contrario, me acechas para quitarme la vida. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Juzgue Jehová entre tú y yo, y véngueme de ti Jehová; pero mi mano no será contra ti. Biblia Nueva Traducción Viviente »Que el Señor juzgue entre nosotros. Tal vez el Señor lo castigue por lo que intenta hacer, pero yo nunca le haré daño. Biblia Católica (Latinoamericana) Mira, padre mío, mira el trozo de tu manto que tengo en la mano. Cuando corté ese pedazo del manto, podría haberte matado. Reconoce entonces que no hay en mí ni malicia ni maldad; yo no te he hecho daño, tú en cambio me buscas para matarme. La Biblia Textual 3a Edicion ¡Juzgue YHVH entre tú y yo, y que YHVH me vengue de ti! Pero mi mano no será contra ti. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Mira, padre mío; mira en mi mano la orla de tu manto. Yo te la corté, pero no te maté. Reconoce y mira que no hay en mí maldad ni rebeldía. Yo no he pecado contra ti; no obstante, tú andas a la caza de mi vida para quitármela. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Juzgue Jehová entre tú y yo, y véngueme de ti Jehová; pero mi mano no será contra ti. |
Saray dijo a Abrán: 'Tú eres el responsable de la afrenta que me hace. Yo puse a mi esclava entre tus brazos, y ella, al verse embarazada, me mira con desprecio. ¡Que el Señor juzgue entre nosotros!'.
Que el Dios de Abrahán y el Dios de Najor -el Dios de sus padres- hagan valer el derecho entre nosotros'. Entonces Jacob juró por el Terror de Isaac, su padre.
el Dios que me concede la venganza y sojuzga a los pueblos a mis pies.
David les salió al encuentro y les dijo: 'Si venís con buenas intenciones, para prestarme ayuda, mi corazón estará con el vuestro; pero si es para traicionarme en provecho de mis enemigos, siendo yo inocente, que lo vea el Dios de nuestros padres y haga justicia'.
Hazme justicia, oh Dios, y defiende mi causa contra esta mala gente, líbrame del hombre falso y criminal.
Queridos míos, no os toméis la justicia por vuestra mano; dejad que sea Dios el que castigue, como dice la Escritura: Yo haré justicia, yo daré a cada cual su merecido.
él, que, siendo ultrajado no respondía con ultrajes siendo maltratado no amenazaba sino que se ponía en manos del que juzga con justicia;
Gritaron con voz potente: '¿Hasta cuándo, tú, el maestro, el santo, el veraz, vas a esperar a hacer justicia y a vengar nuestra sangre de los habitantes de la tierra?'.
Por tanto, yo no te he ofendido, pero tú me haces injuria declarándome la guerra. Que el Señor, el juez, juzgue hoy entre los israelitas y los amonitas'.
David huyó de Nayot de Ramá, fue a ver a Jonatán y le dijo: '¿Qué he hecho yo? ¿Cuál es mi falta? ¿Qué crimen he cometido contra tu padre para que atente contra mi vida?'.
¿Contra quién ha salido a campaña el rey de Israel? ¿A quién persigues? ¡A un perro muerto, a una pulga!
El Señor retribuirá a cada uno según su justicia y su fidelidad, porque el Señor te puso hoy en mis manos y no quise poner mi mano sobre el ungido del Señor.