Éste contestó: 'Cien medidas de aceite'. Entonces le dijo él: 'Pues toma tu recibo, siéntate ahí y escribe en seguida que son cincuenta.'
Juan 2:6 - Biblia Serafín de Ausejo 1975 Había allí seis tinajas de piedra dispuestas para las purificaciones de los judíos, de dos o tres medidas cada una. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Y estaban allí seis tinajas de piedra para agua, conforme al rito de la purificación de los judíos, en cada una de las cuales cabían dos o tres cántaros. Biblia Nueva Traducción Viviente Cerca de allí había seis tinajas de piedra, que se usaban para el lavado ceremonial de los judíos. Cada tinaja tenía una capacidad de entre setenta y cinco a ciento trece litros. Biblia Católica (Latinoamericana) Había allí seis recipientes de piedra, de los que usan los judíos para sus purificaciones, de unos cien litros de capacidad cada uno. La Biblia Textual 3a Edicion Y había allí seis tinajas pétreas asentadas° conforme a la purificación° de los judíos, cada una con capacidad de dos o tres metretas.° Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y estaban allí seis tinajas de piedra para agua, conforme a la purificación de los judíos, y en cada una cabían dos o tres cántaros. Biblia Traducción en Lenguaje Actual Allí había seis grandes tinajas para agua, de las que usan los judíos en sus ceremonias religiosas. En cada tinaja cabían unos cien litros. |
Éste contestó: 'Cien medidas de aceite'. Entonces le dijo él: 'Pues toma tu recibo, siéntate ahí y escribe en seguida que son cincuenta.'
Díceles Jesús: 'Llenad estas tinajas de agua'. Y las llenaron hasta los bordes.
Se originó entonces una discusión entre los discípulos de Juan y un judío acerca de la purificación.
Acerquémonos, pues, con corazón sincero y fe plena, purificado el corazón de toda impureza de conciencia y lavado el cuerpo con agua pura.
enseñanzas sobre abluciones, imposición de manos, resurrección de muertos y juicio final.
pues todo se reduce a alimentos, bebidas y diversas abluciones, o sea, a observancias extrínsecas, vigentes hasta el tiempo de la institución correcta.
Porque, tras haber leído Moisés a todo el pueblo el conjunto de las prescripciones legales, tomando la sangre de los becerros y machos cabríos, juntamente con agua, lana escarlata e hisopo, roció al libro mismo y a todo el pueblo,