Joás dijo a los sacerdotes: Todo el dinero de las colectas del templo, el dinero del empadronamiento, el de los impuestos según la tarifa personal y el de las ofertas voluntarias,
Levítico 27:3 - Nueva Biblia Española (1975) se aplicarán las siguientes tarifas: Un varón entre los veinte y los sesenta años será tasado en quinientos gramos de plata (pesos del templo). Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 En cuanto al varón de veinte años hasta sesenta, lo estimarás en cincuenta siclos de plata, según el siclo del santuario. Biblia Nueva Traducción Viviente esta es la escala de valores que emplearán. Un hombre de entre veinte y sesenta años tendrá el valor de cincuenta siclos de plata, según el siclo del santuario. Biblia Católica (Latinoamericana) Para un hombre de veinte a sesenta años, el valor será de cincuenta siclos de plata, según el siclo del santuario. La Biblia Textual 3a Edicion Al hombre entre veinte y sesenta años lo valorarás en cincuenta siclos de plata, según el siclo del Santuario. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Tu estimación será la siguiente: los hombres de veinte a sesenta años serán valorados en cincuenta siclos de plata, según el peso del siclo del santuario. Biblia Reina Valera Gómez (2023) En cuanto al varón de veinte años hasta sesenta, tu estimación será cincuenta siclos de plata, según el siclo del santuario. |
Joás dijo a los sacerdotes: Todo el dinero de las colectas del templo, el dinero del empadronamiento, el de los impuestos según la tarifa personal y el de las ofertas voluntarias,
Cada uno dará cinco gramos de plata (peso del templo, que vale veinte óbolos): el tributo al Señor será cinco gramos de plata.
El total de oro empleado en la construcción del santuario, oro de la ofrenda agitada ritualmente, fue de ochocientos setenta y ocho kilos (peso del templo).
Cuando alguno consagre su casa al Señor, el sacerdote la tasará según su calidad, La tasación será válida.
Las tasaciones se harán según el peso del templo: diez gramos equivalen a veinte óbolos.
El que cometa un delito, defraudando por inadvertencia algo consagrado al Señor, ofrecerá al Señor en penitencia un carnero sin defecto, tasado en veinte gramos de plata (pesos del templo).
Como víctima, ofrecerá al Señor un carnero sin defecto, tasado en proporción al delito.
Los rescatarán cuando tengan un mes, tasándolos en cincuenta gramos (pesos del templo), dos óbolos por gramo.
recoge cincuenta gramos por cabeza (pesos del santuario: dos óbolos por gramo),