Las suertes se agitan en el regazo, pero el resultado viene del Señor.
Levítico 16:8 - Nueva Biblia Española (1975) Echará a suerte los dos machos cabríos: uno le tocará al Señor y el otro a Azazel. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Y echará suertes Aarón sobre los dos machos cabríos; una suerte por Jehová, y otra suerte por Azazel. Biblia Nueva Traducción Viviente Después hará un sorteo sagrado para determinar qué chivo será apartado como ofrenda para el Señor y cuál llevará los pecados del pueblo al desierto de Azazel. Biblia Católica (Latinoamericana) Aarón echará suertes sobre los dos machos cabríos, uno para Yavé y otro para Azazel. La Biblia Textual 3a Edicion Y Aarón echará suertes sobre los dos machos cabríos: una suerte por YHVH y la otra suerte por Azazel.° Biblia Serafín de Ausejo 1975 y echará las suertes sobre los dos machos cabríos, una para Yahveh y otra para Azazel. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y Aarón echará suertes sobre los dos machos cabríos; una suerte por Jehová, y la otra suerte por el macho cabrío de escapatoria. |
Las suertes se agitan en el regazo, pero el resultado viene del Señor.
Esta es la tierra que distribuirán en propiedad hereditaria a las tribus de Israel y éstas son sus porciones -oráculos del Señor-. Puertas de salida de la ciudad: ''llevarán los nombres de las tribus de Israel.
El que tocó en suerte a Azazel lo presentará vivo ante el Señor, hará la expiación por él y después lo mandará al desierto, a Azazel.
El que ha llevado el macho cabrío a Azazel, lavará sus vestidos, se bañará y después podrá entrar en el campamento.
Después tomará los dos machos cabríos y los presentará ante el Señor a la entrada de la tienda del encuentro.
Tomará el que haya tocado en suerte al Señor y lo ofrecerá en sacrificio expiatorio.
Y se decían unos a otros: Echemos suertes para ver por culpa de quién nos viene esta calamidad. Echaron suertes y le tocó a Jonás.
Pero la distribución de las tierras se hará a suertes: se asignará la heredad a las diversas familias patriarcales
Se la repartirán a suertes entre los clanes. Cada uno recibirá una heredad proporcional al número de registrados. Cada tribu ocupará la parte que le toque por suerte.