Purifícame con el hisopo: quedaré limpio; lávame: quedaré más blanco que la nieve.
Levítico 14:4 - Nueva Biblia Española (1975) Después mandará traer para el purificando dos aves puras, vivas, ramas de cedro, púrpura escarlata e hisopo. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 el sacerdote mandará luego que se tomen para el que se purifica dos avecillas vivas, limpias, y madera de cedro, grana e hisopo. Biblia Nueva Traducción Viviente llevará a cabo una ceremonia de purificación, usando para ello dos aves vivas que estén ceremonialmente puras, un palo de cedro, un hilo escarlata y una rama de hisopo. Biblia Católica (Latinoamericana) El sacerdote mandará traer para el que ha de ser purificado dos pájaros vivos y puros, madera de cedro, escarlata e hisopo. La Biblia Textual 3a Edicion el sacerdote ordenará que se tomen dos avecillas vivas limpias y madera de cedro, púrpura e hisopo para el que se purifica. Biblia Serafín de Ausejo 1975 el sacerdote mandará traer, para el que ha de ser purificado, dos avecillas vivas y puras, madera de cedro, púrpura escarlata e hisopo. Biblia Reina Valera Gómez (2023) entonces el sacerdote mandará que se tomen para el que ha de ser purificado dos avecillas vivas, limpias, y palo de cedro, grana e hisopo. |
Purifícame con el hisopo: quedaré limpio; lávame: quedaré más blanco que la nieve.
Tomen un manojo de hisopo, mójenlo en la sangre del plato y unten de sangre el dintel y las dos jambas, y ninguno de ustedes salga por la puerta de casa hasta la mañana siguiente.
Si no tiene medios para comprarse un cordero, que tome dos tórtolas o dos pichones: uno para el holocausto y el otro para el sacrificio expiatorio. El sacerdote hará la expiación por ella, y quedará pura.
El sacerdote mandará degollar una de las aves en una vasija de loza sobre agua corriente.
Después tomará el ave viva, las ramas de cedro, la púrpura escarlata y el hisopo, y los mojará, también el ave viva, en la sangre del ave degollada sobre agua corriente.
Si no tiene lo suficiente para un cabrito, por la transgresión cometida ofrecerá al Señor dos tórtolas o dos pichones: uno en sacrificio expiatorio y el otro en holocausto.
Un hombre puro tomará un hisopo, lo mojará en el agua y rociará la tienda, los utensilios, todas las personas que estén allí y al que haya tocado huesos, o un cadáver, o un muerto, o una sepultura. El hombre puro rociará al impuro los días tercero y séptimo.
Después el sacerdote tomará ramas de cedro, hisopo y púrpura escarlata y los echará al fuego, donde arde la vaca.
Cuando Moisés acabó de leer al pueblo todas las prescripciones contenidas en la Ley, tomó la sangre de los becerros y las cabras, además de agua, lana escarlata e hisopo, y roció primero el libro mismo y después al pueblo entero