Con el primero harás una ofrenda de veintidós decilitros de flor de harina amasada con un litro de aceite refinado y una libación de un litro de vino.
Levítico 14:10 - Nueva Biblia Española (1975) El octavo día tomará dos corderos sin defecto, una cordera añal sin defecto, doce litros de flor de harina de ofrenda, amasada con aceite y un cuarto de litro de aceite. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 El día octavo tomará dos corderos sin defecto, y una cordera de un año sin tacha, y tres décimas de efa de flor de harina para ofrenda amasada con aceite, y un log de aceite. Biblia Nueva Traducción Viviente »Al octavo día, cada persona que está siendo purificada debe llevar dos corderos sin defecto y una cordera de un año sin defecto, junto con una ofrenda de grano de seis litros de harina selecta humedecida con aceite de oliva, y un tercio de litro de aceite de oliva. Biblia Católica (Latinoamericana) El día octavo tomará dos corderos sin defecto y una oveja de un año sin defecto; y como oblación tres décimas de flor de harina amasada con aceite y un cuartillo de aceite. La Biblia Textual 3a Edicion Al octavo día tomará dos corderos sin defecto y una cordera perfecta de un año, tres décimas de flor de harina amasada con aceite para la ofrenda vegetal y un log° de aceite. Biblia Serafín de Ausejo 1975 El octavo día tomará dos corderos sin defecto y una cordera de un año sin defecto, tres décimas de efá de flor de harina, amasada con aceite, como oblación y un log de aceite. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y el día octavo tomará dos corderos sin defecto, y una cordera de un año sin defecto; y tres décimas de flor de harina para ofrenda amasada con aceite, y un log de aceite. |
Con el primero harás una ofrenda de veintidós decilitros de flor de harina amasada con un litro de aceite refinado y una libación de un litro de vino.
Si es un holocausto de ganado menor, corderos o cabritos, ofrecerá un macho sin defecto.
Si es un holocausto de ganado mayor, ofrecerá un macho sin defecto, lo llevará a la entrada de la tienda del encuentro para que lo acepte el Señor.
El sacerdote que oficie la purificación presentará todo esto, junto con el purificando, ante el Señor a la entrada de la tienda del encuentro.
El sacerdote tomará uno de los corderos y lo ofrecerá en sacrificio penitencial, junto con el cuarto de litro de aceite; los agitará ritualmente ante el Señor.
Si es pobre y no tiene recursos, lomará sólo un cordero, víctima penitencial, para la agitación ritual y para la expiación, cuatro litros de flor de harina amasada con aceite para la ofrenda y un cuarto de litro de aceite
Cuando alguien haga una ofrenda al Señor, su oferta será de flor de harina, sobre la que echará aceite y pondrá incienso.
Toda ofrenda que hagan al Señor será sin fermentar, porque nada que contenga levadura o miel debe ser quemado en oblación al Señor;
Sazonarán todas sus ofrendas. No dejen de echar a sus ofrendas la sal de la alianza de tu Dios. Todas las ofrecerás sazonadas.
harán también una ofrenda de ocho litros de flor de harina amasada con aceite -oblación de aroma que aplaca al Señor- y una libación de un litro de vino.
Si ofrece un cordero en sacrificio expiatorio, será hembra y sin defecto.
El día octavo Moisés llamó a Aarón, a sus hijos y al senado de Israel.
con una ofrenda de flor de harina amasada con aceite: sesenta y seis decilitros por cada novillo, cuarenta y cuatro decilitros por el carnero
llevando como oferta al Señor un cordero añal sin defecto para el holocausto, una cordera añal sin defecto para la expiación y un carnero sin defecto para el sacrificio de comunión.
una fuente de plata de mil trescientos gramos, un aspersorio de plata de setecientos gramos (pesos del santuario), los dos llenos de flor de harina amasada con aceite para la ofrenda;
Jesús le dijo: Cuidado con decírselo a nadie; eso sí, ve a presentarte al sacerdote y ofrece el donativo que mandó Moisés, para que les conste.
y le dijo: Cuidado con decirle nada a nadie; eso sí, ve a presentarte al sacerdote y ofrece por tu purificación lo que mandó Moisés, para que les conste.
Jesús le mandó que no se lo dijera a nadie, pero añadió: Ve a presentarte al sacerdote, y ofrece por tu purificación lo que prescribió Moisés, para que les conste.
Al día siguiente, mirando a Jesús que venía hacia él, dijo: Mirad el cordero de Dios, el que va a quitar el pecado del mundo.
Porque el pan de Dios es el que baja del cielo y va dando vida al mundo.
Yo soy el pan vivo bajado del cielo, el que come pan de éste vivirá para siempre. Pero, además, el pan que yo voy a dar es mi carne, para que el mundo viva.
sino con la sangre preciosa del Mesías, cordero sin defecto y sin mancha,