Luego se echó tres veces sobre el niño, clamando al Señor: ¡Señor, Dios mío, que resucite este niño!
Juan 5:21 - Nueva Biblia Española (1975) Así, igual que el Padre levanta a los muertos y les da vida, también el Hijo da vida a los que quiere; Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Porque como el Padre levanta a los muertos, y les da vida, así también el Hijo a los que quiere da vida. Biblia Nueva Traducción Viviente Pues, así como el Padre da vida a los que resucita de los muertos, también el Hijo da vida a quien él quiere. Biblia Católica (Latinoamericana) Como el Padre resucita a los muertos y les da la vida, también el Hijo da la vida a los que quiere. La Biblia Textual 3a Edicion Porque como el Padre levanta y da vida a los muertos, así también el Hijo da vida a los que quiere. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Pues lo mismo que el Padre resucita a los muertos devolviéndoles la vida, así también el Hijo da vida a los que quiere. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Porque como el Padre levanta a los muertos, y les da vida; así también el Hijo a los que quiere da vida. |
Luego se echó tres veces sobre el niño, clamando al Señor: ¡Señor, Dios mío, que resucite este niño!
Cuando el rey de Israel leyó la carta, se rasgó las, vestiduras, exclamando: ¿Soy yo un dios capaz de dar muerte o vida, para que éste me encargue dé librar a un hombre de su enfermedad? Fíjense bien y verán cómo está buscando un pretexto contra mí.
Le dijo Jesús: Yo soy la resurrección y la vida; el que me presta adhesión, aunque muera, seguirá viviendo;
Ya que has puesto en su mano a la humanidad entera, que dé vida definitiva a todo lo que le has entregado.
Es el Espíritu quien da vida, la carne no es de ningún provecho; las exigencias que les he estado exponiendo son espíritu y son vida.
y si el Espíritu del que resucitó a Jesús de la muerte habita en ustedes, el mismo que resucitó al Mesías dará vida también a sus seres mortales, por medio de este Espíritu suyo que habita en ustedes.
así está escrito: 'El primer hombre, Adán, fue un ser animado”, el último Adán es un espíritu de vida.
Pero ahora miren: yo soy yo, y no hay otro fuera de mi; yo doy la muerte y la vida, yo desgarro y yo curo, y no hay quien libre de mi mano.