Sienten enfrente a dos canallas que declaren contra él: 'Has maldecido a Dios y al rey'. Lo sacan afuera y lo apedrean, hasta que muera'.
Juan 10:33 - Nueva Biblia Española (1975) Le contestaron los dirigentes: No te apedreamos por ninguna obra excelente, sino por blasfemia; porque tú, siendo un hombre, te estás haciendo Dios. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Le respondieron los judíos, diciendo: Por buena obra no te apedreamos, sino por la blasfemia; porque tú, siendo hombre, te haces Dios. Biblia Nueva Traducción Viviente —No te apedreamos por ninguna buena acción, ¡sino por blasfemia! —contestaron—. Tú, un hombre común y corriente, afirmas ser Dios. Biblia Católica (Latinoamericana) Los judíos respondieron: 'No te apedreamos por algo hermoso que hayas hecho, sino por insultar a Dios; porque tú, siendo hombre, te haces Dios. La Biblia Textual 3a Edicion Le respondieron los judíos: Por buena obra no te apedreamos, sino por blasfemia,° y porque tú, siendo hombre, te haces Dios. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Respondiéronle los judíos: 'No te queremos apedrear por una obra buena, sino por blasfemia: porque tú, siendo hombre, te haces a ti mismo Dios'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Le respondieron los judíos, diciendo: Por buena obra no te apedreamos, sino por la blasfemia; y porque tú, siendo hombre, te haces Dios. |
Sienten enfrente a dos canallas que declaren contra él: 'Has maldecido a Dios y al rey'. Lo sacan afuera y lo apedrean, hasta que muera'.
Saca al blasfemo fuera del campamento. Que todos los que le oyeron pongan las manos sobre su cabeza y luego toda la asamblea lo apedreará.
El que blasfeme el nombre del Señor, es reo de muerte. Toda la asamblea lo apedreará. Emigrante o indígena, quien blasfeme el nombre del Señor morirá.
Lo rodearon entonces los dirigentes judíos y le dijeron: ¿Hasta cuándo vas a no dejarnos vivir? Si eres tú el Mesías, dínoslo abiertamente.
Les replicó Jesús: Muchas obras excelentes les he hecho ver, que son del Padre; ¿por cuál de esas obras me apedrean?
Le replicaron las autoridades judías: Nosotros tenemos una Ley, y, según esa Ley, debe morir, porque se ha hecho hijo de Dios.
Más aún, en vista de esto, los dirigentes judíos trataban de matarlo, ya que no sólo suprimía el sábado, sino también llamaba a Dios su propio Padre, haciéndose él mismo igual a Dios.
Sométase todo individuo a las autoridades constituidas; no existe autoridad sin que lo disponga Dios y, por tanto, las actuales han sido establecidas por él.
El, a pesar de su condición divina, no se aferró' a su categoría de Dios;