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Jonás 1:12 - Nueva Biblia Española (1975)

El contestó: Tómenme en vilo y arrójenme al mar, y el mar se les calmará; pues sé que por mi culpa les sobrevino esta furiosa tormenta.

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Biblia Reina Valera 1960

Él les respondió: Tomadme y echadme al mar, y el mar se os aquietará; porque yo sé que por mi causa ha venido esta gran tempestad sobre vosotros.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

—Échenme al mar —contestó Jonás— y volverá la calma. Yo sé que soy el único culpable de esta terrible tormenta.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

Jonás les contestó: 'Llévenme y arrójenme al mar, y éste se calmará, porque sé que por culpa mía les ha sobrevenido esta tempestad.

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La Biblia Textual 3a Edicion

Y él respondió: Alzadme en vilo y arrojadme al mar, y se os calmará, pues yo sé que por mi causa os ha sobrevenido esta gran tempestad.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

Él les respondió: 'Alzadme en vilo y tiradme al mar, y el mar se os apaciguará; pues sé que por mi causa os ha sobrevenido esta tempestad'.

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

Él les respondió: Tomadme, y echadme al mar, y el mar se os aquietará; porque yo sé que por mi causa ha venido esta gran tempestad sobre vosotros.

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Jonás 1:12
10 Tagairtí Cros  

Entonces David, al ver al ángel que estaba hiriendo a la población, dijo al Señor: ¡Soy yo el que ha pecado! ¡Soy yo el culpable! ¿Qué han hecho estas ovejas? Carga la mano sobre mí y sobre mi familia. El Señor se arrepintió del castigo, y dijo al ángel, que estaba asolando ala población: ¡Basta! ¡Detén tu mano! El ángel del Señor estaba junto a la era de Arauná, el jebuseo.


Entonces David dijo a Dios: Soy yo quien ordenó el censo del pueblo. Soy yo el que ha pecado. Soy yo el culpable. ¿Qué han hecho estas ovejas? Dios mío, descarga la mano sobre mí y sobre mi familia, pero no hieras a tu pueblo.


Es a un ser humano a quien afecta tu maldad; a un hombre como tú, tu justicia.


Más vale maña que armas de guerra. Un solo fallo echa a perder muchos bienes.


Le preguntaron: ¿Qué hacemos contigo para que se nos calme el mar? Porque el mar seguía embraveciéndose.


Pero ellos remaban para alcanzar tierra firme, y no podían porque el mar seguía embraveciéndose.


ni calculan tampoco que les conviene que un solo hombre muera por el pueblo y no que perezca la nación entera.


y me ha dicho: 'No temas, Pablo. Tienes que comparecer ante el emperador, y Dios te ha concedido la vida de todos tus compañeros de navegación'.


No podrán los israelitas resistir a sus enemigos, les volverán la espalda, porque se han hecho execrables. No estaré más con ustedes mientras no extirpen la execración de en medio de ustedes. Levántate, purifica al pueblo, diles:,