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Éxodo 18:7 - Nueva Biblia Española (1975)

salió él a recibirlo, se postró, lo besó y se saludaron los dos; después entraron en la tienda.

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Biblia Reina Valera 1960

Y Moisés salió a recibir a su suegro, y se inclinó, y lo besó; y se preguntaron el uno al otro cómo estaban, y vinieron a la tienda.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

Entonces Moisés salió a recibir a su suegro. Se inclinó ante él y le dio un beso. Luego de preguntarse el uno al otro cómo les iba, entraron en la carpa de Moisés.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

Moisés salió al encuentro de su suegro, le hizo una profunda reverencia y lo besó. Se preguntaron el uno al otro acerca de su salud y entraron en la tienda.

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La Biblia Textual 3a Edicion

Entonces Moisés salió a recibir a su suegro, se postró, y lo besó, y se preguntaron el uno al otro por su salud, y entraron en la tienda.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

Salió Moisés al encuentro de su suegro, se postró, le besó, y después de los saludos, entraron en la tienda.

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

Y Moisés salió a recibir a su suegro, y se inclinó, y lo besó; y se preguntaron el uno al otro cómo estaban, y vinieron a la tienda.

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Éxodo 18:7
23 Tagairtí Cros  

Cuando Abrán volvía después de derrotar a Codorlahomer y los reyes aliados, el rey de Sodoma salió a su encuentro en el valle de Savé, que es Valderrey.


Alzó la vista y vio a tres hombres de pie frente a él. Al verlos, corrió a su encuentro desde la puerta de la tienda y se prosternó en tierra,


Los dos ángeles llegaron a Sodoma por la tarde. Lot, que estaba sentado a la puerta de la ciudad, al verlos, se levantó a recibirlos y se prosternó rostro en tierra.


Cuando Labán oyó las noticias de Jacob, hijo de su hermana, salió corriendo a su encuentro, lo abrazó, lo besó y lo llevó a su casa. Allí él contó a Labán todo lo sucedido.


Ni siquiera me dejaste besar a mis hijas y nietos. ¡Qué imprudente has sido! •


Cuando José entró en casa, ellos le presentaron los regalos que habían traído y se postraron en tierra.


después besó, llorando, a todos sus hermanos. Sólo entonces le hablaron sus hermanos.


Cuando estaban llegando a Gosén, José mandó preparar la carroza y se dirigió a Gosén a recibir a su padre, Al verlo, se le echó al cuello y lloró abrazado a él.


Cuando llegó Urías, David le preguntó por Joab, el ejército y la guerra.


Betsabé fue al rey Salomón a hablarle de Adonías. El rey se levantó para recibirla y le hizo una inclinación; luego se sentó en el trono, mandó poner un trono para su madre, y Betsabé se sentó a su derecha.


no sea que se irrite y vayan a la ruina si llega a inflamarse su ira.


Cuando le informaron a Moisés: 'Está ahí tu suegro Jetró, que ha venido a verte, con tu mujer y tus hijos',


Moisés levantó la tienda de Dios y la plantó fuera, a distancia del campamento, y la llamó 'Tienda del encuentro'. El que tenía que consultar al Señor, salía fuera del campamento y se dirigía a la tienda del encuentro.


El Señor dijo a Aarón: Sal al desierto a recibir a Moisés. El fue, lo alcanzó en el monte de Dios y lo besó.


Cuando Balac oyó que se acercaba Balaán, salió a recibirle a Ciudad Moab, en la frontera del Arnón, límite de su territorio.


Tú no me besaste: ella, en cambio, desde que entré no ha dejado de besarme los pies.


Todos lloraban mucho y, abrazando a Pablo, lo besaban;


Los hermanos de Roma, que tenían noticia de nuestras peripecias, salieron a recibirnos al Foro Apio y las Tres Tiendas. Al verlos, Pablo dio gracias a Dios y cobró ánimos.


Jefté volvió a su casa de Atalaya. Y fue precisamente su hija quien salió a recibirlo, con panderos y danzas; su hija única, pues Jefté no tenía más hijos o hijas.


y estos diez quesos llévaselos al comandante. Mira a ver cómo están tus hermanos y toma el recibo que te den.


David dejó su carga al cuidado de los de intendencia, corrió hacia las filas y preguntó a sus hermanos qué tal estaban.