1 ¿Por qué se amotinan las naciones y los pueblos hacen proyectos vanos? 2 Se levantan los reyes de la tierra, los príncipes conspiran contra el Señor y su mesías: 3 '¡Rompamos sus cadenas, sacudamos su yugo!'. 4 El que mora en el cielo se sonríe, el Señor se burla de ellos. 5 Luego les habla enfurecido, y con su ira los llena de terror: 6 'Ya tengo yo a mi rey entronizado sobre Sión, mi monte santo'. 7 Proclamaré el decreto que el Señor ha pronunciado: 'Tú eres mi hijo, yo mismo te he engendrado hoy. 8 Pídeme y te daré en herencia las naciones, en propiedad los confines de la tierra. 9 Los destrozarás con un cetro de hierro, los triturarás como a vasos de alfarero'. 10 Ahora, pues, oh reyes, sed sensatos; dejaos corregir, oh jueces de la tierra. 11 Servid al Señor con reverencia, postraos temblorosos ante él, 12 para que no se irrite y os veáis perdidos, pues su cólera se inflama en un instante. ¡Dichosos los que en él buscan refugio! |
Evaristo Martín Nieto©