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Jueces 8:26 - Biblia Version Moderna (1929)

26 Y fué el peso de los zarcillos de oro que él había pedido, mil setecientos siclos de oro; sin contar  las media-lunas, y los pendientes, y los vestidos de púrpura que había sobre los reyes de Madián: y sin contar los collares que tenían al cuello de sus camellos.

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Biblia Reina Valera 1960

26 Y fue el peso de los zarcillos de oro que él pidió, mil setecientos siclos de oro, sin las planchas y joyeles y vestidos de púrpura que traían los reyes de Madián, y sin los collares que traían sus camellos al cuello.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

26 Todos los aretes de oro pesaron unos diecinueve kilos, sin contar los ornamentos reales ni los pendientes ni la ropa de púrpura usada por los reyes de Madián, ni las cadenas que sus camellos llevaban en el cuello.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

26 El peso de los anillos de oro fue de mil setecientos siclos, sin contar los prendedores, los aros y los trajes de púrpura que llevaban los reyes de Madián; y sin contar tampoco los collares que pendían del cogote de sus camellos.

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La Biblia Textual 3a Edicion

26 Y el peso de los zarcillos de oro que él pidió fue mil setecientos siclos de oro, aparte de las lunetas, los pendientes y los vestidos de púrpura que llevaban los reyes de Madián, y aparte de los collares que llevaban sus camellos al cuello.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

26 El peso de los anillos de oro que había pedido fue de mil setecientos siclos de oro, sin contar las lunetas, los pendientes, los vestidos de púrpura que llevaban los reyes de Madián ni los collares que pendían del cuello de sus camellos.

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Jueces 8:26
14 Σταυροειδείς Αναφορές  

¶Y Mardoqueo salió de la presencia del rey, con traje real de jacinto y blanco, con una gran corona de oro y con un manto de lino fino blanco y de púrpura; y la ciudad de Susán era toda alborozo y regocijo.


Hace para sí colchas bordadas; de lino fino blanco y de púrpura es su vestido.


En aquel día quitará el Señor la gallardía de las ajorcas de los pies, y las redecillas, y las media lunas:


Plata batida se trae de Tarsis, y oro de Ufaz; se labra por el artífice, y se labra por las manos del platero: de azul y de púrpura es su vestido: todo ello es hechura de artífices hábiles.


De lino fino recamado traído de Egipto eran tus velas, para que te sirviese de bandera; azul y púrpura de las islas de Elisa formaban tu toldo.


¶Había cierto hombre rico, que se vestía de púrpura y de lino fino blanco, y tenía banquetes espléndidos todos los días.


Y los soldados entretejieron una corona de espinas, y se la pusieron en la cabeza, y le vistieron un manto de púrpura;


Jesús entonces salió, llevando la corona de espinas y el manto de púrpura; y les dijo Pilato: ¡He aquí al hombre!


Y la mujer estaba vestida de púrpura y escarlata, y adornada de oro y piedras preciosas y perlas, teniendo en su mano un cáliz de oro, lleno de abominaciones, es decir, las inmundicias de sus fornicaciones;


mercancía de oro y de plata, y de piedras preciosas, y de perlas, y de lino fino blanco, y de púrpura, y de seda, y de escarlata; y toda suerte de madera olorosa, y toda suerte de alhajas de marfil, y toda suerte de alhajas de madera preciosísima, y de bronce, y de hierro, y de mármol:


diciendo: ¡Ay, ay de aquella gran ciudad, que iba vestida de lino fino blanco y de púrpura, y de escarlata, y adornada de oro, y de piedras preciosas, y de perlas;


Entonces dijeron Zeba y Zalmuna: Levántate tú, y arrójate sobre nosotros; porque como es el hombre, así es su fuerza.  Levantóse pues Gedeón, y mató a Zeba y a Zalmuna; y tomó las media-lunas que traían al cuello de sus camellos.


Y ellos contestaron: De muy buena gana te lo daremos.  Tendieron pues un manto, y echaron allí cada cual un zarcillo de su despojo.


Y de ello hizo Gedeón un efod, y lo puso en su ciudad, en Ofra: y todo Israel idolatraba, acudiendo allí, tras de ese efod: lo cual vino a ser causa de ruina a Gedeón y a su casa.


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