¡y bendito sea el Dios altísimo, que entregó tus enemigos en tu mano! Y dióle Abram el diezmo de todo.
Lucas 1:68 - Biblia Version Moderna (1929) ¡Bendito sea el Señor Dios de Israel! porque ha visitado a su pueblo y obrado su redención; Περισσότερες εκδόσειςBiblia Reina Valera 1960 Bendito el Señor Dios de Israel, Que ha visitado y redimido a su pueblo, Biblia Nueva Traducción Viviente «Alaben al Señor, el Dios de Israel, porque ha visitado y redimido a su pueblo. Biblia Católica (Latinoamericana) Bendito sea el Señor, Dios de Israel,
porque ha visitado y redimido a su pueblo. La Biblia Textual 3a Edicion Bendito el Señor Dios de Israel, Porque visitó e hizo redención a su pueblo, Biblia Serafín de Ausejo 1975 ' Bendito el Señor Dios de Israel, porque ha venido a ver a su pueblo y a traerle el rescate, Biblia Reina Valera Gómez (2023) Bendito el Señor Dios de Israel, porque ha visitado y redimido a su pueblo, |
¡y bendito sea el Dios altísimo, que entregó tus enemigos en tu mano! Y dióle Abram el diezmo de todo.
y dijo: ¡Bendito sea Jehová, el Dios de mi señor Abraham, que no ha apartado su benevolencia y su fidelidad de mi señor! estando yo en el camino, guióme Jehová a la casa de los hermanos de mi señor.
Dijo también: ¡Bendito sea Jehová, el Dios de Sem! y será Canaán siervo de ellos.
Y más aún; de esta manera ha dicho el rey mismo: ¡Bendito sea Jehová, el Dios de Israel, que ha dado hoy quien se siente sobre mi trono, viéndolo mis ojos!
Entonces él dijo: ¡Bendito sea Jehová, el Dios de Israel, el cual prometió con su boca a David mi padre, (y con su mano lo ha cumplido), diciendo:
¶Luego David bendijo a Jehová en presencia de toda la Asamblea; y dijo David: ¡Bendito eres, oh Jehová, Dios de nuestro padre Israel, desde la eternidad y hasta la eternidad!
¶David dijo entonces a toda la Asamblea: ¡Bendecid a Jehová vuestro Dios! Y toda la Asamblea bendijo a Jehová, el Dios de sus padres; e inclinando la cabeza, se postraron delante de Jehová, y delante del rey.
¡Bendito sea Jehová, el Dios de Israel, desde la eternidad y hasta la eternidad! y diga todo el pueblo: ¡Amén! ¡Aleluya!
Él ha enviado redención a su pueblo; para siempre ha ordenado su pacto; santo y temible es su nombre.
¡Bendito sea Jehová, el Dios de Israel, por los siglos de los siglos! ¡Amén, y Amén!
Y creyó el pueblo; y oyendo que Jehová había visitado a los hijos de Israel, y que había mirado su aflicción, inclinaron la cabeza y adoraron.
salvación del poder de nuestros enemigos, y de la mano de todos los que nos aborrecen;
y te derribarán al suelo, y a tus hijos en medio de ti; y no dejarán en ti piedra sobre piedra: por cuanto no conociste el tiempo de tu visitación!
Y ésta, presentándose en aquella misma hora, daba gracias al Señor, y hablaba de aquel niño a todos los que esperaban la redención en Jerusalem.
Mas nosotros esperábamos que él era aquel que había de redimir a Israel. Empero, y además de todo esto, éste es el tercer día desde que acontecieron estas cosas.
Y temor apoderóse de todos; y alababan a Dios, diciendo: ¡Un gran profeta se ha levantado entre nosotros! y: ¡Dios ha visitado a su pueblo!
¶¡Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, el cual nos ha bendecido en Cristo con toda suerte de bendiciones espirituales, en las regiones celestiales;
en quien tenemos redención por medio de su sangre, la remisión de nuestros pecados, según las riquezas de su gracia,
ni tampoco por medio de la sangre de machos de cabrío y de terneros, sino por la virtud de su propia sangre, entró una vez para siempre en el lugar santo, habiendo ya hallado eterna redención.
¶Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, el cual, conforme a su grande misericordia, nos ha reengendrado para una esperanza viva, por medio de la resurrección de Jesucristo de entre los muertos;
¶Dijo entonces David a Abigail: ¡Bendito sea Jehová, el Dios de Israel, que te ha enviado hoy a encontrarme!