Cuanto a los santos que están en la tierra, “son mis príncipes en los que tengo mi complacencia”.
1 Samuel 19:2 - Biblia Nacar-Colunga se lo comunicó a éste, diciéndole: “Saúl, mi padre, busca matarte. Ponte, pues, en guardia; mañana, por favor, no te dejes ver y escóndete.' Dugang nga mga bersyonBiblia Reina Valera 1960 y dio aviso a David, diciendo: Saúl mi padre procura matarte; por tanto cuídate hasta la mañana, y estate en lugar oculto y escóndete. Biblia Nueva Traducción Viviente le contó acerca de los planes de su padre. «Mañana por la mañana —lo previno—, deberás encontrar un lugar donde esconderte en el campo. Biblia Católica (Latinoamericana) Le advirtió pues a David: 'Saúl, mi padre, trata de matarte; manténte en guardia mañana temprano, ponte a resguardo y escóndete. La Biblia Textual 3a Edicion Y habló Jonatán a David, diciendo: Mi padre Saúl procura matarte. Te ruego, ten cuidado por la mañana, quédate en un lugar secreto y escóndete. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Por eso Jonatán avisó a David y le dijo: 'Saúl, mi padre, intenta matarte; así pues, anda sobre aviso desde mañana por la mañana y procura permanecer oculto y esconderte. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Pero Jonatán, hijo de Saúl, amaba a David en gran manera. Y Jonatán dio aviso a David, diciendo: Saúl mi padre procura matarte; por tanto, mira ahora por ti hasta la mañana, y quédate en un lugar secreto, y escóndete. |
Cuanto a los santos que están en la tierra, “son mis príncipes en los que tengo mi complacencia”.
El amigo ama en todo tiempo; es un hermano en el día de la desventura”
Habiendo tenido noticia de esta asechanza el hijo de la hermana de Pablo, vino, y entrando en el cuartel se lo comunicó a Pablo.
pero su resolución fue conocida de Saulo. Día y noche guardaban las puertas para darle muerte;'
Propuso Saúl a Jonatán, su hijo, y a todos sus servidores matar a David; y Jonatán, hijo de Saúl, que amaba mucho a David,'
Yo saldré con mi padre al campo adonde tú estés; hablaré de ti a mi padre, veré qué piensa y te lo comunicaré.”
Jonatán le dijo: “No, no será así; no morirás. ¿Había de celarme a mí eso mi padre? No hace mi padre cosa alguna, ni grande ni pequeña, sin dármela a conocer. ¿Por qué había de ocultarme ésta? No hay nada de eso.”
David le respondió: “Mañana es el novilunio, y yo debería sentarme junto al rey en el convite. Me iré y me ocultaré en el campo hasta la tarde.