Mateo 9:3 - Versión Biblia Libre

³ En respuesta a esto, algunos de los maestros religiosos decían para sí mismos: “¡Está blasfemando!”

Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

³ Entonces algunos de los escribas decían dentro de sí: Este blasfema.

Biblia Nueva Traducción Viviente

³ Entonces algunos de los maestros de la ley religiosa decían en su interior: «¡Es una blasfemia! ¿Acaso se cree que es Dios?».

Biblia Católica (Latinoamericana)

³ Algunos maestros de la Ley pensaron: '¡Qué manera de burlarse de Dios!'

La Biblia Textual 3a Edicion

³ Pero algunos de los escribas decían dentro de sí: Éste blasfema.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

³ Entonces algunos escribas pensaron para sí: '¡Pero si éste está blasfemando!'.

Mateo 9:3 Referencias Cruzadas

Levítico 24:16

Cualquiera que maldiga el nombre del Señor debe ser ejecutado. Todos ustedeslo apedrearán hasta la muerte, tanto si es un extranjero que vive con ustedes como si es un israelita. Si maldicen mi nombre, deben ser ejecutados.

Números 15:30

“Pero la persona que peca a manera de desafío, ya sea un israelita o un extranjero, está blasfemando al Señor. Serán expulsados de su pueblo.

Mateo 26:65

Entonces el sumo sacerdote rasgó su ropa, y dijo: “¡Está diciendo blasfemia! ¿Para qué necesitamos testigos? ¡Miren, ustedes mismos han escuchado su blasfemia!

Mateo 7:29

porque él enseñaba como alguien que tenía autoridad, y no como sus maestros religiosos.

Marcos 14:64

¡Ustedes mismos han escuchado la blasfemia! ¿Qué tienen para decir?” Y todos lo hallaron culpable y lo condenaron a muerte.

Marcos 3:28

“Les digo la verdad: los pecados y las blasfemias pueden ser perdonados,

Marcos 3:29

pero si alguno blasfema rechazando al Espíritu Santo, no podrá ser perdonado, porque es culpable de un pecado eterno”.

Marcos 7:21

Es desde adentro, desde la mente de las personas, que salen los malos pensamientos: la inmoralidad sexual, los robos, los asesinatos, el adulterio,

Lucas 5:21

Los maestros religiosos y los Fariseos comenzaron a discutir este hecho. “¿Quién es este que dice blasfemias?” preguntaron. “¿Quién puede perdonar pecados? ¡Solo Dios puede hacerlo!”