Biblia Todo Logo
La Biblia Online
- Anuncios -





Mateo 20:6 - NT Traducción Contemporánea de la Biblia

6 Faltando una hora para terminar el horario laboral, el dueño de la viña encontró a otros desempleados y les dijo: – ¿Por qué están aquí desocupados todo el día?

Ver Capítulo Copiar


Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

6 Y saliendo cerca de la hora undécima, halló a otros que estaban desocupados; y les dijo: ¿Por qué estáis aquí todo el día desocupados?

Ver Capítulo Copiar

Biblia Nueva Traducción Viviente

6 »A las cinco de la tarde, se encontraba nuevamente en la ciudad y vio a otros que estaban allí. Les preguntó: “¿Por qué ustedes no trabajaron hoy?”.

Ver Capítulo Copiar

Biblia Católica (Latinoamericana)

6 Ya era la última hora del día, la undécima, cuando salió otra vez y vio a otros que estaban allí parados. Les preguntó: '¿Por qué se han quedado todo el día sin hacer nada?'

Ver Capítulo Copiar

La Biblia Textual 3a Edicion

6 Y saliendo hacia la° undécima, halló a otros parados; les dice: ¿Por qué habéis estado aquí todo el día desocupados?

Ver Capítulo Copiar

Biblia Serafín de Ausejo 1975

6 Salió aún hacia la hora undécima, encontró a otros que estaban allí y les pregunta: '¿Cómo estáis aquí todo el día sin trabajar?'.

Ver Capítulo Copiar

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

6 Y saliendo cerca de la hora undécima, halló otros que estaban ociosos, y les dijo: ¿Por qué estáis aquí todo el día ociosos?

Ver Capítulo Copiar




Mateo 20:6
10 Referencias Cruzadas  

El dueño de la viña salió nuevamente al medio día y a la mitad de la tarde, e hizo lo mismo.


Le respondieron: – Porque nadie nos contrató. Entonces les dijo: – Ustedes también vayan a trabajar en mi viña.


Y cuando llegaron los que empezaron a trabajar una hora antes que terminase el horario laboral, recibieron cada uno un denario.


Es necesario que haga la tarea y la misión que me encomendó el Padre, y también mis seguidores deben cumplir esta misión, para dar esperanza en medio de la miseria humana. Hagámoslo mientras dura el día, porque pronto vendrá la noche, donde no podemos trabajar.


Pues todos los atenienses, y los extranjeros que estaban por allí, siempre se interesaban y era parte de su pasatiempo, oír y discutir de cosas nuevas, ideas novedosas y cosas diferentes de lo que estaban acostumbrados.


con el propósito de que no sean tercos ni perezosos, más bien, sigan el ejemplo de los que, con paciencia y fe, heredan las promesas.


Síguenos en:

Anuncios


Anuncios


¡Síguenos en WhatsApp! Síguenos