Biblia Todo Logo
La Biblia Online
- Anuncios -





Hechos 8:40 - Nueva Versión Internacional 2019 (simplificada - Nuevo Testamento)

40 En cuanto a Felipe, apareció en Azoto. Luego se fue predicando la buena noticia en todos los pueblos hasta que llegó a Cesarea.

Ver Capítulo Copiar


Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

40 Pero Felipe se encontró en Azoto; y pasando, anunciaba el evangelio en todas las ciudades, hasta que llegó a Cesarea.

Ver Capítulo Copiar

Biblia Nueva Traducción Viviente

40 Entre tanto, Felipe se encontró más al norte, en la ciudad de Azoto. Predicó la Buena Noticia allí y en cada pueblo a lo largo del camino, hasta que llegó a Cesarea.

Ver Capítulo Copiar

Biblia Católica (Latinoamericana)

40 En cuanto a Felipe, se encontró en Azoto y salió a evangelizar uno tras otro todos los pueblos hasta llegar a Cesarea.

Ver Capítulo Copiar

La Biblia Textual 3a Edicion

40 Y Felipe fue hallado en Azoto, y al pasar, evangelizaba a todas las ciudades, hasta que llegó a Cesarea.

Ver Capítulo Copiar

Biblia Serafín de Ausejo 1975

40 Felipe se encontró en Azoto; de paso, fue evangelizando todas las ciudades hasta llegar a Cesarea.

Ver Capítulo Copiar




Hechos 8:40
21 Referencias Cruzadas  

Vivía en Cesarea un capitán del ejército romano llamado Cornelio, del regimiento conocido como el Italiano.


Un día después, llegó a Cesarea. Cornelio estaba esperándolo con los parientes y amigos íntimos que había reunido.


»En aquel momento se presentaron en la casa donde yo estaba tres hombres. Habían sido enviados desde Cesarea a buscarme.


Herodes ordenó buscar a Pedro, pero no lo encontraron. Entonces interrogó a los soldados y mandó matarlos. Después, viajó de Judea a Cesarea y se quedó allí.


Cuando desembarcó en Cesarea, subió a Jerusalén a saludar a la iglesia y luego bajó a Antioquía.


Algunos de los discípulos de Cesarea nos acompañaron y nos llevaron a la casa de Mnasón, donde íbamos a alojarnos. Este era de Chipre, y uno de los primeros discípulos.


Al día siguiente, salimos y llegamos a Cesarea. Nos hospedamos en casa de Felipe, el evangelista, que era uno de los siete.


Entonces el comandante llamó a dos de sus capitanes y les ordenó: ―Quiero que esta noche, a las nueve, vayan a Cesarea. Alisten un grupo de doscientos soldados de infantería, setenta de caballería y doscientos lanceros.


Cuando la caballería llegó a Cesarea, le entregaron la carta al gobernador y le presentaron también a Pablo.


Tres días después de llegar a la provincia, Festo subió de Cesarea a Jerusalén.


Pasados algunos días, el rey Agripa y Berenice llegaron a Cesarea para saludar a Festo.


Festo respondió: «Pablo está preso en Cesarea, y yo mismo saldré en breve para allá.


Después de pasar entre los judíos unos ocho o diez días, Festo bajó a Cesarea. Al día siguiente, reunió al tribunal y mandó que le trajeran a Pablo.


Después de testificar y anunciar el mensaje del Señor, Pedro y Juan se pusieron en camino de vuelta a Jerusalén. De camino iban predicando la buena noticia en muchos pueblos samaritanos.


Cuando se enteraron de eso, los creyentes se lo llevaron a Cesarea y de allí lo mandaron a Tarso.


Esas poderosas maravillas y milagros que he hecho las he logrado hacer gracias al poder del Espíritu de Dios. Comencé a anunciar la buena noticia de Cristo en Jerusalén, por todas partes, hasta la región de Iliria.


Síguenos en:

Anuncios


Anuncios


¡Síguenos en WhatsApp! Síguenos