Biblia Todo Logo
La Biblia Online
- Anuncios -





Levítico 22:25 - Biblia Nueva Versión Internacional 2022

25 No recibirán de manos de un extranjero animales así, para ofrecerlos como alimento del Dios de ustedes. No se les aceptarán porque son deformes y tienen defectos».

Ver Capítulo Copiar


Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

25 Ni de mano de extranjeros tomarás estos animales para ofrecerlos como el pan de vuestro Dios, porque su corrupción está en ellos; hay en ellos defecto, no se os aceptarán.

Ver Capítulo Copiar

Biblia Nueva Traducción Viviente

25 y no deberás aceptar animales así de los extranjeros y luego ofrecerlos como sacrificio a tu Dios. Dichos animales no serán aceptados a tu favor, porque están mutilados o tienen defectos».

Ver Capítulo Copiar

Biblia Católica (Latinoamericana)

25 ni tampoco recibirán de mano de extranjeros alguna de estas víctimas para ofrecerla como alimento del Dios de ustedes, porque dicha mutilación es un defecto, y con esto no será aceptada.

Ver Capítulo Copiar

La Biblia Textual 3a Edicion

25 Ni aun por mano de extranjeros permitiréis que esos animales sean aproximados como pan de vuestro Dios, porque son deformes y tienen defecto. No os serán aceptados.

Ver Capítulo Copiar

Biblia Serafín de Ausejo 1975

25 Y no permitiréis que tales víctimas sean ofrecidas de mano de un extranjero como alimento de vuestro Dios, pues su deformidad es un defecto y son, por tanto, inaceptables'.

Ver Capítulo Copiar

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

25 Y de mano de hijo de extranjero no ofreceréis el pan de vuestro Dios de todas estas cosas; porque su corrupción está en ellas: hay en ellas falta, no se os aceptarán.

Ver Capítulo Copiar




Levítico 22:25
12 Referencias Cruzadas  

Ustedes dejaron entrar en mi santuario a extranjeros, incircuncisos de corazón y de cuerpo, para que profanaran mi Templo. Mientras tanto, ustedes me ofrecían alimentos, grasa y sangre, violando así mi pacto con todas sus abominaciones.


Deben ser santos para su Dios y no profanar su nombre. Son ellos los que presentan al Señor las ofrendas puestas al fuego, que son como el pan de su Dios. Por eso deben ser santos.


Considéralo santo, porque él ofrece el pan de tu Dios. Santo será para ti, porque santo soy yo, el Señor, que los consagro a ustedes.


Las láminas quedaron allí, como advertencia a los israelitas, para que ninguno que no fuera descendiente de Aarón ni estuviera autorizado se atreviera a ofrecer incienso ante el Señor; de lo contrario, le sucedería lo mismo que a Coré y su gente, tal como el Señor se lo había advertido por medio de Moisés.


recuerden que en ese entonces ustedes estaban separados de Cristo, excluidos de la ciudadanía de Israel y ajenos a los pactos de la promesa, sin esperanza y sin Dios en el mundo.


Sabemos que el que ha nacido de Dios no practica el pecado: Jesucristo, que nació de Dios, lo protege y el maligno no llega a tocarlo.


Síguenos en:

Anuncios


Anuncios


¡Síguenos en WhatsApp! Síguenos