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Éxodo 10:27 - Biblia Nueva Versión Internacional 2022

27 Pero el Señor endureció el corazón del faraón, y este no quiso dejarlos ir,

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Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

27 Pero Jehová endureció el corazón de Faraón, y no quiso dejarlos ir.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

27 Pero el Señor endureció el corazón del faraón una vez más, y no quiso dejarlos salir.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

27 y ni siquiera sabemos cuáles animales hemos de ofrecer hasta que lleguemos al lugar.

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La Biblia Textual 3a Edicion

27 Pero YHVH endureció el corazón de Faraón, y no consintió en dejarlos partir.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

27 Pero Yahveh endureció el corazón del Faraón, que no quiso dejarles salir.

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

27 Mas Jehová endureció el corazón de Faraón, y no quiso dejarlos ir.

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Éxodo 10:27
9 Referencias Cruzadas  

El Señor dijo a Moisés: «Ve a hablar con el faraón. En realidad, soy yo quien ha endurecido el corazón del faraón y sus funcionarios, para realizar entre ellos mis señales milagrosas.


Pero el Señor endureció el corazón del faraón y este no dejó que los israelitas se fueran.


Moisés y Aarón realizaron ante el faraón todas estas maravillas; pero el Señor endureció el corazón del faraón, y este no dejó salir de su país a los israelitas.


Yo, por mi parte, endureceré el corazón del faraón para que los persiga. Voy a cubrirme de gloria a costa del faraón y de todo su ejército. ¡Y los egipcios sabrán que yo soy el Señor!». Así lo hicieron los israelitas.


El Señor endureció el corazón del faraón, rey de Egipto, para que saliera en persecución de los israelitas, los cuales marchaban con aire triunfal.


El Señor había advertido a Moisés: «Cuando vuelvas a Egipto, asegúrate de hacer ante el faraón todos los prodigios que te he dado el poder de realizar. Yo, por mi parte, endureceré su corazón para que no deje ir al pueblo.


Así que Dios tiene misericordia de quien él quiere tenerla y endurece a quien él quiere endurecer.


El resto de la humanidad, los que no murieron a causa de estas plagas, tampoco se arrepintieron de sus malas acciones ni dejaron de adorar a los demonios y a los ídolos de oro, plata, bronce, piedra y madera, los cuales no pueden ver ni oír ni caminar.


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