1 Pedro 4:9 - Biblia Version Moderna (1929)

⁹ usando de hospitalidad los unos para con los otros sin murmuración:

Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

⁹ Hospedaos los unos a los otros sin murmuraciones.

Biblia Nueva Traducción Viviente

⁹ Abran las puertas de su hogar con alegría al que necesite un plato de comida o un lugar donde dormir.

Biblia Católica (Latinoamericana)

⁹ Acójanse unos a otros en sus casas sin quejarse.

La Biblia Textual 3a Edicion

⁹ Sed hospitalarios los unos para con los otros, sin murmuración.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

⁹ Practicad la hospitalidad unos con otros, sin murmuración.

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

⁹ Hospedaos los unos a los otros sin murmuraciones.

1 Pedro 4:9 Referencias Cruzadas

Génesis 24:19

Y luego que acabó de darle de beber, ella dijo: También sacaré para tus camellos, hasta que acaben de beber.

Romanos 12:13

comunicando para con las necesidades de los santos; adictos a la hospitalidad.

Romanos 16:23

Os saluda Gayo mi huesped, que lo es también de toda la iglesia. Os saluda Erasto, tesorero de la ciudad, y el hermano Cuarto.

2 Corintios 9:7

Haga cada cual según tiene propuesto en su corazón; no de mala gana, o por necesidad; porque Dios ama al dador alegre.

Filipenses 2:14

Haced todas las cosas sin murmuraciones ni contiendas;

1 Timoteo 3:2

Es pues necesario que el obispo sea irreprensible, marido de una sola mujer, templado, de buen sentido, modesto, hospitalario, apto para enseñar;

Tito 1:8

sino hospitalario, amador de lo bueno, de buen sentido, justo, santo, templado,

Filemón 1:14

pero sin tu consentimiento no quisiera hacer nada; para que tu beneficio no fuese como de necesidad, sino de tu voluntad espontánea.

Hebreos 13:16

Mas del bien hacer, y de la comunicación de beneficios, no os olvidéis; porque en los tales sacrificios Dios se complace mucho.

Hebreos 13:2

No os olvidéis de la hospitalidad; porque por medio de ella, algunos han hospedado a ángeles, sin saberlo.

Santiago 5:9

¶No murmuréis, hermanos, los unos contra los otros, para que no seáis condenados: he aquí que el juez está a las puertas.