Santiago 4:12 - Biblia Traducción en Lenguaje Actual

¹² Dios es el único juez. Él nos dio la ley, y es el único que puede decir si somos inocentes o culpables. Por eso no tenemos derecho de criticar a los demás.

Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

¹² Uno solo es el dador de la ley, que puede salvar y perder; pero tú, ¿quién eres para que juzgues a otro?

Biblia Nueva Traducción Viviente

¹² Solo Dios, quien ha dado la ley, es el Juez. Solamente él tiene el poder para salvar o destruir. Entonces, ¿qué derecho tienes tú para juzgar a tu prójimo?

Biblia Católica (Latinoamericana)

¹² Uno solo es juez: Aquel que hizo la Ley y que puede salvar y condenar. Pero, ¿quién eres tú para juzgar al prójimo?

La Biblia Textual 3a Edicion

¹² Uno solo es el Legislador y Juez, el que puede salvar y perder; pero tú, ¿quién eres, que juzgas al prójimo?

Biblia Serafín de Ausejo 1975

¹² Uno es el legislador y juez: el que puede salvar o perder. Pero tú, ¿quién eres para juzgar al prójimo?

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

¹² Uno es el dador de la ley, que puede salvar y perder, ¿quién eres tú que juzgas a otro?

Santiago 4:12 Referencias Cruzadas

Job 38:2

«¿Quién eres tú para dudar de mi sabiduría, si solo tonterías has dicho?

Isaías 33:22

Dios es nuestro juez y nuestro rey. ¡Nuestro Dios nos salvará!

Mateo 10:28

No tengan miedo de la gente que puede destruir el cuerpo, pero no la vida que está en ustedes. Más bien, teman a Dios, que tiene el poder de destruirlos totalmente en el infierno.

Lucas 12:5

Tengan más bien temor de Dios, pues él no solo puede quitarles la vida, sino que también puede enviarlos al infierno. A él sí deben tenerle miedo.

Romanos 14:13

Ya no debemos criticarnos unos a otros. Al contrario, no hagamos que, por culpa nuestra, un seguidor de Cristo peque o pierda su confianza en Dios.

Romanos 14:4

Ustedes no tienen derecho de criticar al esclavo de otro. Es el dueño del esclavo quien decide si su esclavo trabaja bien o no. Así también, Dios es el único que tiene poder para ayudar a cada uno a cumplir bien su trabajo.

Romanos 2:1

Cuando alguno de ustedes acusa a otro de hacer algo malo, se acusa a sí mismo, porque también hace lo mismo. Así que no tiene ninguna razón de acusar y juzgar a otro,

Romanos 9:20

yo le contestaría: «Amigo mío, tú no eres nadie para cuestionar las decisiones de Dios.» La olla de barro no puede quejarse con el que la hizo, de haberle dado esa forma.

Hebreos 7:25

Jesús puede salvar para siempre a los que, por medio de él, quieren ser amigos de Dios. Pues vive eternamente, y siempre está pidiendo a Dios por ellos.

Santiago 5:9

No se quejen unos de otros, para que Dios no los castigue, pues él es nuestro juez, y ya pronto viene.

1 Samuel 25:10

pero él les contestó: «¿Y quién es ese David, hijo de Jesé? ¡Seguramente ha de ser uno de esos esclavos que huyen de sus amos!