Luego se lavó la cara y, controlando sus emociones, salió y dijo: —¡Sirvan ya la comida!
Y lavó su rostro y salió, y se contuvo, y dijo: Poned pan.
Después de lavarse la cara, volvió a salir, ya más controlado. Entonces ordenó: «Traigan la comida».
Después se lavó la cara y volvió. Tratando de dominarse, ordenó: 'Sirvan la comida.
Después se lavó el rostro y salió, y refrenándose, ordenó: ¡Poned alimentos!
Luego se lavó la cara y salió. Y haciendo esfuerzos por contenerse, dijo: 'Servid la mesa'.