Ester 8:17 - Biblia Traducción en Lenguaje Actual

¹⁷ A medida que se iba conociendo la orden del rey y su documento, en cada provincia y ciudad, los judíos festejaban con gran alegría. Y tanto era el miedo que les tenían a los judíos, que muchos en el país aceptaron su religión.

Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

¹⁷ Y en cada provincia y en cada ciudad donde llegó el mandamiento del rey, los judíos tuvieron alegría y gozo, banquete y día de placer. Y muchos de entre los pueblos de la tierra se hacían judíos, porque el temor de los judíos había caído sobre ellos.

Biblia Nueva Traducción Viviente

¹⁷ En cada provincia y ciudad, en cada lugar donde llegaba el decreto del rey, los judíos se alegraban mucho, festejaban a lo grande, y declararon día feriado y de celebración. También muchas personas del territorio se hicieron judíos por temor a lo que pudieran hacerles los judíos.

La Biblia Textual 3a Edicion

¹⁷ Y en cada provincia y ciudad, dondequiera llegaba la orden del rey y su edicto, los judíos tenían regocijo y alegría, banquetes y día de solemnidad. Y muchos de entre los pueblos de la tierra se hicieron judíos,° porque el temor de los judíos había caído sobre ellos.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

¹⁷ En cada provincia y en cada ciudad, dondequiera llegaba la orden del rey y su edicto, había entre los judíos regocijo y alegría, banquete y día de fiesta. Muchos de los habitantes del país se hicieron judíos, porque el temor a los judíos se había apoderado de ellos.

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

¹⁷ Y en cada provincia y en cada ciudad donde llegó el mandamiento del rey, los judíos tuvieron alegría y gozo, banquete y día de placer. Y muchos de los pueblos de la tierra se hacían judíos, porque el temor de los judíos había caído sobre ellos.

Ester 8:17 Referencias Cruzadas

Génesis 35:5

Y cuando se pusieron en marcha, Dios hizo que todas las ciudades vecinas les tuvieran miedo, así que nadie los persiguió.

Nehemías 8:10

Esdras también les dijo: «¡Hagan fiesta! Coman de lo mejor, beban vino dulce; inviten a los que no tengan nada preparado. Hoy es un día dedicado a nuestro Dios, así que no se pongan tristes. ¡Alégrense, que Dios les dará fuerzas!»

Ester 9:19

Por eso los judíos de las provincias eligieron el día catorce del mes de Adar como día de celebración, y en ese día se hacen regalos unos a otros.

Ester 9:2

En todas las provincias del reino de Asuero, los judíos se reunieron en sus respectivas ciudades, dispuestos a atacar a cualquiera que les quisiera hacer daño. Pero nadie se atrevió a hacerles frente, porque ahora todos les tenían miedo.

Ester 9:22

para recordar el mes y los días en que los judíos se libraron de sus enemigos, y su sufrimiento y tristeza se cambió en gozo y alegría. En esos días de fiesta se harían regalos unos a otros, y ayudarían a los pobres.

Ester 9:3

Además, por miedo a Mardoqueo, todas las autoridades ayudaron a los judíos,

Salmos 105:38

Cuando ellos salieron de Egipto los egipcios se alegraron, pues les tenían mucho miedo.

Salmos 18:43

43-45 (44-46) Dios mío, tú me libras de la gente que anda buscando pelea; me hiciste jefe de naciones, y gente extraña que yo no conocía ahora está dispuesta a servirme. Tan pronto esos extranjeros me oyen, se desaniman por completo y temblando salen de sus escondites dispuestos a obedecerme.

Éxodo 15:16

¡Todos ellos se llenarán de angustia y de terror! »Dios mío, tu gran poder los dejará espantados, ¡inmóviles como piedras, hasta que tu pueblo haya pasado!

Deuteronomio 11:25

Nunca nadie podrá derrotarlos, porque su Dios hará que todas las naciones tiemblen de miedo ante ustedes. Dios así lo ha prometido.

Deuteronomio 2:25

También nos prometió que, a partir de entonces, todos los pueblos de la región nos tendrían miedo. ¡Con solo oír hablar de nosotros se llenarían de espanto y angustia!

Josué 2:11

Cuando lo supimos, nos dio mucho miedo y nos desanimamos. Reconocemos que el Dios de ustedes reina en el cielo y también aquí en la tierra.

Josué 2:9

y les dijo: —Yo sé que Dios les ha entregado a ustedes este territorio, y todos tenemos miedo, especialmente los gobernantes.