Jeremías 8:6 - Biblia Torres Amat 1825

⁶ Yo estuve atento, y los escuché: Nadie habla cosa buena; nadie hay que haga penitencia de su pecado, diciendo: ¡Ay! ¿Qué es lo que yo he hecho? Al contrario, todos han vuelto a tomar la impetuosa carrera de sus vicios, como caballo que a rienda suelta corre a la batalla.

Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

⁶ Escuché y oí; no hablan rectamente, no hay hombre que se arrepienta de su mal, diciendo: ¿Qué he hecho? Cada cual se volvió a su propia carrera, como caballo que arremete con ímpetu a la batalla.

Biblia Nueva Traducción Viviente

⁶ Escucho sus conversaciones y no oigo una sola palabra de verdad. ¿Hay alguien que esté apenado por haber hecho lo malo? ¿Hay alguien que diga: “¡Qué cosa tan terrible he hecho!”? ¡No! ¡Todos corren por el camino del pecado tan veloces como galopa un caballo a la batalla!

Biblia Católica (Latinoamericana)

⁶ Ven y oyen, pero hablan otro lenguaje y nadie llora su maldad, diciendo: '¿Qué es lo que he hecho?' Todos prosiguen su loca carrera como un caballo que se lanza a la carga.

La Biblia Textual 3a Edicion

⁶ He estado atento y he escuchado: No hablan rectamente, No hay quien se arrepienta de su maldad, y diga: ¿Qué he hecho? Cada cual se vuelve a su carrera, Como corcel desbordado en la batalla.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

⁶ Estuve atento y oí: hablan como no deben nadie se arrepiente de su maldad diciendo: '¿Qué he hecho?'. Todos se precipitan en su carrera, como caballo lanzado al combate.

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

⁶ Escuché y oí; pero no hablan derecho, no hay hombre que se arrepienta de su mal, y que diga: ¿Qué he hecho? Cada cual se volvió a su carrera, como caballo que arremete hacia la batalla.

Jeremías 8:6 Referencias Cruzadas

Job 10:2

Le diré a mi Dios: No quieras condenarme de este modo; manifiéstame por qué me juzgas de esta manera.

Job 34:31

Ahora, pues, ya que he hablado de Dios y en su defensa, no estorbaré que hables tú también lo que quieras.

Job 34:32

Si he errado, enséñame el error; si me pruebas que he hablado la iniquidad, no diré nada más.

Salmos 14:2

El Señor echó desde el cielo una mirada sobre los hijos de los hombres, para ver si había uno que tuviese juicio, o que buscase a Dios.

Isaías 30:18

El pueblo de Sión morará en Jerusalén ; enjugarás tus lágrimas, ¡oh pueblo fiel! El Señor, apiadándose de ti, usará contigo de misericordia; al momento que oyere la voz de tu clamor, te responderá benigno.

Isaías 57:17

Por la malvada avaricia de mi pueblo, yo me irrité y lo he azotado; le oculté mi rostro y me indigné, y él se fue vagando tras los antojos de su corazón.

Isaías 59:16

Y vio que no quedaba hombre de bien; y se pasmó de no encontrar quien se pusiese por medio; y halló en su mismo brazo la salud y su justicia fue la que le fortaleció.

Jeremías 23:25

He oído lo que andan diciendo aquellos profetas que en mi Nombre profetizan la mentira: He soñado, dicen, he tenido un sueño profético.

Jeremías 3:5

¿Acaso has de estar siempre enojado, o mantendrás hasta el fin tu indignación? Pero he aquí que tú has hablado así, y has ejecutado toda suerte de crímenes, hasta no poder más.

Jeremías 5:1

Recorred las calles de Jerusalén . Ved y observad, y buscad en sus plazas si encontráis un hombre que obre lo que es justo, y que procure ser fiel; y si lo halláis, yo usaré con ella de misericordia.

Ezequiel 18:28

porque si él entra otra vez en sí mismo, y se aparta de todas las iniquidades que ha cometido, tendrá verdadera vida y no morirá.

Ezequiel 22:30

Y busqué entre ellos un varón justo que se interpusiese entre mí y el pueblo como un vallado, y pugnase contra mí a favor de la tierra, para que yo no la destruyese; mas no hallé ninguno.

Daniel 9:11

Todo Israel se hizo prevaricador de tu ley, y se desvió para no oír la voz tuya; y así llovió sobre nosotros la maldición y el anatema que está escrito en el libro de Moisés, siervo de Dios, pues pecamos contra el Señor.

Miqueas 7:2

No hay ya un santo sobre la tierra; no se halla un justo entre los hombres; cada uno pone asechanzas a la vida del otro; cada cual anda a caza de sus hermanos para quitarles la vida.

Sofonías 3:7

Y dije: Por fin, oh Israel, me temerás y recibirás mi amonestación, a fin de que tu casa no sea arruinada por causa de todas las culpas, por las cuales te castigué. Pero tus hijos pusieron su conato en pervertir todos sus afectos.

Hageo 1:5

Ahora, pues, esto dice el Señor de los ejércitos: Poneos a considerar seriamente vuestros procederes.

Hageo 1:7

Así habla el Señor de los ejércitos: Poneos a reflexionar atentamente sobre vuestros procederes.

Malaquías 3:16

Entonces aquellos que temen a Dios estuvieron hablando unos con otros. Y Dios estuvo atento, y escuchó y fue escrito ante él un libro de memoria a favor de los que temen al Señor, y tienen en el corazón su santo Nombre.

2 Pedro 3:9

Por lo demás, el día del Señor vendrá como ladrón, y entonces los cielos con espantoso estruendo pasarán de una parte a otra, los elementos con el ardor del fuego se disolverán, y la tierra, y las obras que hay en ella serán abrasadas.

Apocalipsis 9:20

ni tampoco se arrepintieron de sus homicidios, ni de sus hechicerías, ni de su fornicación, o deshonestidad, ni de sus robos.