Santiago 4:1 - Biblia Serafín de Ausejo 1975

¹ ¿De dónde vienen entre vosotros las guerras y de dónde las luchas? ¿No vienen precisamente de aquí, de vuestras pasiones, que hacen la guerra en vuestros miembros?

Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

¹ ¿De dónde vienen las guerras y los pleitos entre vosotros? ¿No es de vuestras pasiones, las cuales combaten en vuestros miembros?

Biblia Nueva Traducción Viviente

¹ ¿Qué es lo que causa las disputas y las peleas entre ustedes? ¿Acaso no surgen de los malos deseos que combaten en su interior?

Biblia Católica (Latinoamericana)

¹ ¿De dónde proceden esas guerras y esas riñas entre ustedes? De aquí abajo, por supuesto; son el fruto de las codicias, que hacen la guerra dentro de ustedes mismos.

La Biblia Textual 3a Edicion

¹ ¿De dónde esas guerras y de dónde esas contiendas entre vosotros? ¿No es de allí, de vuestras pasiones, las cuales combaten en vuestros miembros?

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

¹ ¿De dónde vienen las guerras y los pleitos entre vosotros? ¿No es de vuestras concupiscencias, las cuales combaten en vuestros miembros?

Biblia Traducción en Lenguaje Actual

¹ ¿Saben por qué hay guerras y pleitos entre ustedes? ¡Pues porque no saben dominar su egoísmo y su maldad!

Santiago 4:1 Referencias Cruzadas

Jeremías 17:9

Nada hay más tramposo que el corazón y está desahuciado; ¿quién podrá entenderlo?

Mateo 15:19

Porque del corazón salen las malas intenciones, los homicidios, los adulterios, las fornicaciones, los robos, los falsos testimonios, las injurias.

Juan 8:44

Vosotros procedéis del diablo, que es vuestro padre, y son los deseos de vuestro padre los que queréis poner en práctica. Él fue homicida desde el principio; y no se mantuvo en la verdad, porque no hay verdad en él. Cuando profiere la mentira, está diciendo lo que le es propio, porque es mentiroso y padre de la mentira.

Romanos 7:23

pero percibo en mis miembros otra ley que está en guerra contra la ley de mi mente y que me esclaviza bajo la ley del pecado que habita en mis miembros.

Romanos 7:5

De hecho, cuando vivíamos sometidos a lo puramente humano, las pasiones pecaminosas, sirviéndose de la ley, actuaban en nuestros miembros, haciéndonos producir frutos para la muerte,

Romanos 8:7

Pues el anhelo de la carne es enemistad para con Dios, ya que no se somete a la ley de Dios y ni tan siquiera tiene capacidad para ello;

Gálatas 5:17

Pues la carne desea contra el Espíritu, y el Espíritu contra la carne. Ambos se combaten entre sí, de suerte que no hacéis las cosas que quisierais.

Colosenses 3:5

Haced morir, pues, cuanto hay de terreno en vosotros: lujuria, impureza, pasión, deseo malo, y la sed de lucro, que es una idolatría.

2 Timoteo 2:23

Déjate de especulaciones estúpidas y absurdas, que, como bien sabes, engendran polémicas;

Tito 3:3

Porque hubo un tiempo en que también nosotros éramos insensatos, desobedecíamos, nos extraviábamos, servíamos a deseos y placeres diversos, pasábamos nuestra vida entre malicia y envidia, odiados y odiándonos mutuamente.

Tito 3:9

Por el contrario, procura evitar cuestiones estúpidas, genealogías, polémicas y controversias en torno a la ley, que carecen totalmente de utilidad y de sentido.

Santiago 1:14

Cada uno es tentado por su propio deseo, que lo atrae y lo seduce.

Santiago 4:3

Pedís y no recibís, porque pedís mal, para gastarlo en vuestras pasiones.

1 Pedro 1:14

Como hijos obedientes, no os amoldéis a las pasiones que teníais cuando estabais en vuestra ignorancia;

1 Pedro 2:11

Queridos hermanos, os exhorto a que, como extranjeros y peregrinos, os abstengáis de los deseos puramente humanos que combaten contra el alma.

2 Pedro 2:18

Profiriendo discursos ampulosos y vacíos, seducen con pasiones de la carne y desenfrenos a los que apenas han acabado de distanciarse de los que viven en el error.

2 Pedro 3:3

Ante todo, sabed que en los últimos días vendrán hombres sarcásticos, que caminarán según sus propios deseos