Salmos 119:51 - Biblia Serafín de Ausejo 1975

⁵¹ Los soberbios me toman a irrisión, mas de tu ley no me desvío;

Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

⁵¹ Los soberbios se burlaron mucho de mí, Mas no me he apartado de tu ley.

Biblia Nueva Traducción Viviente

⁵¹ Los orgullosos me tratan con un desprecio total, pero yo no me aparto de tus enseñanzas.

Biblia Católica (Latinoamericana)

⁵¹ Los soberbios se burlaban mucho de mí, pero no me he movido de tu Ley.

La Biblia Textual 3a Edicion

⁵¹ Mucho me han escarnecido los soberbios, Pero no me he apartado de tu Ley.

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

⁵¹ Los soberbios se burlaron mucho de mí; mas no me he apartado de tu ley.

Biblia Traducción en Lenguaje Actual

^51-53 Dios mío, yo nunca olvido tu palabra eterna, pues ella me da consuelo. Los orgullosos me ofenden; me molesta saber que esos malvados no siguen tus enseñanzas. Pero yo las cumplo sin falta.

Salmos 119:51 Referencias Cruzadas

Job 23:11

A sus huellas se ha ajustado mi pie, he seguido su camino sin desviarme,

Salmos 119:157

Muchos son mis enemigos y opresores, pero yo no me desvío de tu ley.

Salmos 119:21

Tú lanzas maldición a los soberbios que abandonan tus leyes.

Salmos 119:31

yo me apego a tu enseñanza: no permitas, Señor, que me avergüence.

Salmos 119:69

Los soberbios me embarran de mentiras, mas yo guardo tus leyes con amor,

Salmos 44:18

Y todo esto nos viene sin haberte olvidado, sin que hayamos mentido a tu alianza,

Isaías 38:3

'¡Oh Yahveh! Acuérdate de que yo he andado en tu presencia con fidelidad e integridad de corazón, haciendo lo que es recto a tus ojos'. Y Ezequías rompió en un gran llanto.

Isaías 42:4

No flaqueará ni desmayará, hasta que imponga en la tierra equidad; las islas esperan su enseñanza.

Jeremías 20:7

Tú me sedujiste, Yahveh, y yo me dejé seducir. Fuiste más fuerte que yo y contra mí prevaleciste. Sirvo de irrisión todo el día; todos ellos se burlan de mí.

Lucas 23:35

El pueblo estaba allí mirando. Los jefes se mofaban de él, diciendo: 'Ha salvado a otros; pues que se salve a sí mismo, si él es el Cristo de Dios, el elegido'.