Deuteronomio 28:35 - Biblia Reina Valera Gómez (2023)

³⁵ Jehová te herirá con maligna pústula en las rodillas y en las piernas, sin que puedas ser curado; desde la planta de tu pie hasta tu coronilla.

Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

³⁵ Te herirá Jehová con maligna pústula en las rodillas y en las piernas, desde la planta de tu pie hasta tu coronilla, sin que puedas ser curado.

Biblia Nueva Traducción Viviente

³⁵ El Señor te cubrirá las rodillas y las piernas con llagas incurables. De hecho, te llenarás de llagas desde la cabeza hasta los pies.

Biblia Católica (Latinoamericana)

³⁵ Yavé te herirá con úlceras malignísimas en las rodillas y en las piernas, de las que no podrás sanar, desde la planta de los pies hasta la coronilla de tu cabeza.

La Biblia Textual 3a Edicion

³⁵ YHVH te golpeará con pústula maligna en las rodillas y en las piernas, desde la planta de tu pie hasta tu coronilla, sin que puedas ser curado.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

³⁵ Yahveh te herirá de úlceras malignas en las rodillas y en las piernas de las que no podrás ser curado, desde la planta del pie hasta la coronilla.

Deuteronomio 28:35 Referencias Cruzadas

2 Samuel 14:25

Y no había en todo Israel ninguno tan alabado por su hermosura como Absalón; desde la planta de su pie hasta la coronilla no había en él defecto.

Isaías 1:6

Desde la planta del pie hasta la cabeza no hay en él cosa sana, sino herida, hinchazón y podrida llaga; no están curadas, ni vendadas, ni suavizadas con aceite.

Isaías 3:17

Por tanto, el Señor raerá la cabeza de las hijas de Sión, y Jehová descubrirá sus vergüenzas.

Isaías 3:24

Y será que en lugar de perfume aromático vendrá hediondez; y cuerda en vez de cinturón; y calvez en lugar de la compostura del cabello; y en lugar de ropa de gala ceñimiento de cilicio; y quemadura en vez de hermosura.

Deuteronomio 28:27

Jehová te herirá de la plaga de Egipto, y con almorranas, y con sarna, y con comezón, de que no puedas ser curado.

Deuteronomio 28:34

Y enloquecerás a causa de lo que verás con tus ojos.

Apocalipsis 16:2

Y fue el primero, y derramó su copa sobre la tierra; y vino una pestilente y maligna úlcera sobre los hombres que tenían la marca de la bestia y que adoraban su imagen.