Jeremías 9:3 - Biblia Palabra de Dios para Todos

³ «Su lengua es como un arco y sus mentiras son las flechas. En el país domina la mentira, no la verdad, pues cada día van de mal en peor; no me conocen». Lo dice el SEÑOR.

Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

³ Hicieron que su lengua lanzara mentira como un arco, y no se fortalecieron para la verdad en la tierra; porque de mal en mal procedieron, y me han desconocido, dice Jehová.

Biblia Nueva Traducción Viviente

³ «Mi pueblo encorva sus lenguas como arcos para lanzar mentiras. Se rehúsan a defender la verdad; solo van de mal en peor. Ellos no me conocen», dice el Señor.

Biblia Católica (Latinoamericana)

³ Que cada uno desconfíe de su amigo y que no tenga confianza ni en su hermano, porque el hermano sólo piensa en suplantar al otro y el amigo anda levantando calumnias.

La Biblia Textual 3a Edicion

³ Tensan su lengua como arco suyo, Lanzan mentiras, Y la verdad no prevalece en la tierra, Porque proceden de mal en mal, Y a mí no me conocen, dice YHVH.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

³ Guardaos bien unos de otros, y en ningún hermano confiéis; pues todo hermano pone zancadillas y todo amigo anda con calumnias.

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

³ Tensan su lengua como su arco, para lanzar mentira; pero no son valientes para la verdad en la tierra: porque de mal en mal proceden, y no me han conocido, dice Jehová.

Jeremías 9:3 Referencias Cruzadas

Génesis 39:16

Después ella se quedó con la ropa de José hasta que llegó su esposo.

Proverbios 12:5

Los pensamientos del justo son honestos, pero los consejos del perverso son engañosos.

Isaías 1:3

El buey conoce a su amo, y el burro, el lugar donde lo alimentan; pero Israel no me conoce, mi pueblo no tiene entendimiento».

Isaías 3:5

La gente se maltratará entre sí. Los jóvenes atacarán a los mayores, y la gente común no respetará a los líderes.

Isaías 6:5

Entonces yo exclamé: «¡Pobre de mí! Ya me doy por muerto porque mis labios son impuros, vivo en medio de un pueblo de labios impuros y, sin embargo, he visto al Rey, al SEÑOR Todopoderoso».

Isaías 9:18

Ciertamente la maldad arde como un fuego, consume matorrales y espinos. Incendia los árboles del bosque y los lanza en un torbellino de humo.

Jeremías 12:6

Porque hasta tus hermanos y tu propia familia te han traicionado y sueltan un grito tras de ti. Aunque te hablen amablemente, no confíes en ellos.

Jeremías 22:16

Defendía los derechos del pobre y del necesitado, y por eso le fue bien. Eso sí es conocerme verdaderamente. Lo dice el SEÑOR.

Jeremías 31:34

Ya nadie tendrá que enseñar a sus amigos y familiares a conocer al SEÑOR, pues todos me conocerán, desde el más pequeño hasta el más grande. Perdonaré sus faltas y me olvidaré de sus pecados. Es la decisión del SEÑOR».

Jeremías 4:22

«Porque mi pueblo es tonto, no me conoce. Son unos niños insensatos que no entienden nada. Son muy inteligentes para hacer el mal, pero no saben hacer el bien».

Jeremías 5:4

Entonces me dije: «Esos son solo los pobres e ignorantes, por eso actúan así. No conocen el camino del SEÑOR ni lo que Dios ha ordenado.

Jeremías 5:5

Iré entonces a la gente rica e importante y les hablaré. De seguro ellos conocen el camino del SEÑOR y lo que él ha ordenado». Pero todos ellos también habían quebrado el yugo y roto las ataduras.

Jeremías 6:28

Todos ellos son rebeldes y van sembrando calumnias por todos lados. Son como el bronce y el hierro, destructores todos ellos.

Jeremías 7:26

Pero no me han hecho caso ni me han prestado atención, sino que tercamente me han rechazado y se han portado peor que sus antepasados.

Jeremías 9:5

Cada cual le miente a su semejante; no dicen la verdad. Han adiestrado su lengua a decir mentiras y pecan hasta más no poder.

Jeremías 9:8

Su lengua es como una flecha envenenada; su boca solo dice mentiras. Le hablan amablemente a su semejante pero en su interior planean aprovecharse de él.

Ezequiel 8:13

Entonces me dijo: «Verás cosas aun peores que estas».

Daniel 11:27

Esos dos reyes harán todo lo posible por destruirse. Se sentarán juntos a la mesa y hablarán solo mentiras, pero nada de eso les funcionará porque Dios ya tiene programado el fin de cada uno.

Levítico 19:11

»No roben, ni se estafen ni se digan mentiras.

Marcos 8:38

La gente de hoy en día es infiel y pecadora. Si alguien se avergüenza de mí y de mi enseñanza ante esta gente, entonces yo también me avergonzaré de él cuando venga en la gloria de mi Padre con los santos ángeles.

Juan 17:3

Esta es la vida eterna: que ellos te conozcan a ti, el único Dios verdadero, y a Jesucristo a quien tú enviaste.

Hechos 24:9

Los otros judíos estaban de acuerdo, diciendo que todo era verdad.

Romanos 1:16

Pues no siento vergüenza de la buena noticia acerca de Cristo porque es el poder que Dios usa para salvar a todos los que creen en él. Se anunció primero a los judíos, pero ahora también se anuncia a los que no son judíos.

Romanos 1:28

Ya que la gente creyó que no era importante conocer a Dios, él los dejó que siguieran pervirtiendo su mente y terminaron haciendo lo que no deben.

Romanos 3:13

Su boca es un sepulcro abierto; usan la lengua para engañar. Lo que dicen es como el veneno de una serpiente.

1 Corintios 15:34

¡Reaccionen! Entren en razón y salgan del pecado, pues yo sé que algunos de ustedes no conocen a Dios y digo esto para que les dé vergüenza.

Filipenses 1:28

Quiero escuchar que no se han dejado intimidar por sus enemigos. Esto será una clara señal de la derrota de ellos y de que ustedes se van a salvar, y todo esto viene de Dios.

2 Timoteo 3:13

pero los perversos y los engañadores irán de mal en peor, engañarán y serán engañados.

Apocalipsis 12:11

Nuestros hermanos lo vencieron con la sangre del Cordero y con el testimonio que dieron. Su amor por la vida no era tanto que temieran a la muerte.

Jueces 14:17

La mujer lloró durante el resto de los días que duró la fiesta y siguió molestando a su esposo para que le diera la respuesta. Finalmente, al séptimo día Sansón le dio la respuesta. Ella se fue entonces a explicarle la respuesta a su pueblo.

Jueces 2:10

Finalmente toda esa generación murió y nació una nueva generación que no conocía al SEÑOR, ni tampoco sabía todo lo que él había hecho por Israel.

1 Samuel 2:12

Los hijos de Elí eran perversos. No les importaba el SEÑOR