Biblia Todo Logo
La Biblia Online
- Anuncios -





Jeremías 7:4 - Biblia Nueva Versión Internacional 2017

4 No confiéis en esas palabras engañosas que repiten: ‘¡Este es el templo del Señor, el templo del Señor, el templo del Señor!’

Ver Capítulo Copiar


Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

4 No fiéis en palabras de mentira, diciendo: Templo de Jehová, templo de Jehová, templo de Jehová es este.

Ver Capítulo Copiar

Biblia Nueva Traducción Viviente

4 pero no se dejen engañar por los que les prometen seguridad simplemente porque aquí está el templo del Señor. Ellos repiten: ‘¡El templo del Señor está aquí! ¡El templo del Señor está aquí!’.

Ver Capítulo Copiar

Biblia Católica (Latinoamericana)

4 No confíen en palabras mentirosas como éstas: ¡Miren el Templo de Yavé!, ¡aquí está el Templo de Yavé!, ¡éste es el Templo de Yavé!

Ver Capítulo Copiar

La Biblia Textual 3a Edicion

4 No confiéis en palabras engañosas, que dicen: ¡Casa de YHVH, Casa de YHVH, Casa de YHVH es ésta!

Ver Capítulo Copiar

Biblia Serafín de Ausejo 1975

4 No confiéis en estas engañosas palabras: 'Templo de Yahveh, templo de Yahveh, templo de Yahveh es éste'.

Ver Capítulo Copiar

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

4 No confiéis en palabras de mentira, diciendo: El templo de Jehová, el templo de Jehová, el templo de Jehová es este.

Ver Capítulo Copiar




Jeremías 7:4
16 Referencias Cruzadas  

yo arrancaré a Israel de la tierra que le he dado y repudiaré el templo que he consagrado en mi honor. Entonces Israel será el hazmerreír de todos los pueblos.


Vosotros que os llamáis ciudadanos de la ciudad santa y confiáis en el Dios de Israel, cuyo nombre es el Señor Todopoderoso:


Nadie clama por la justicia, nadie va a juicio con integridad. Se confía en argumentos sin sentido, y se mienten unos a otros. Conciben malicia y dan a luz perversidad.


Así dice el Señor: «El cielo es mi trono, y la tierra, el estrado de mis pies. ¿Qué casa me podéis construir? ¿Qué morada me podéis ofrecer?


Entonces el profeta Jeremías le dijo al profeta Jananías: ―Presta mucha atención. A pesar de que el Señor no te ha enviado, tú has hecho que este pueblo confíe en una mentira.


Porque cometieron una infamia en Israel: adulteraron con la mujer de su prójimo y dijeron mentiras en mi nombre, cosas que jamás les ordené. Yo lo sé, y de eso soy testigo», afirma el Señor.


«Comunícales a todos los deportados que así dice el Señor acerca de Semaías de Nejelán: “Puesto que Semaías os ha profetizado sin que yo lo haya enviado, y os ha hecho confiar en una mentira,


Curan por encima la herida de mi pueblo, y les desean: “¡Paz, paz!”, cuando en realidad no hay paz.


lo mismo que hice con Siló haré con esta casa que lleva mi nombre y en la que vosotros confiáis, y con el lugar que os di a vosotros y a vuestros antepasados.


Vosotras me habéis profanado delante de mi pueblo por un puñado de cebada y unas migajas de pan. Por las mentiras que decís, y que mi pueblo cree, se mata a los que no deberían morir y se deja con vida a los que no merecen vivir.


Sus gobernantes juzgan por soborno, sus sacerdotes instruyen por paga, y sus profetas predicen por dinero; para colmo, se apoyan en el Señor, diciendo: «¿No está el Señor entre nosotros? ¡No vendrá sobre nosotros ningún mal!»


Aquel día no tendrás que avergonzarte más de todas tus rebeliones contra mí. Quitaré de en medio de ti a esa gente altanera y jactanciosa, y así nunca más volverás a ser arrogante en mi santo monte.


Producid frutos que demuestren arrepentimiento. Y no os pongáis a pensar: “Tenemos a Abraham por padre”. Porque os digo que aun de estas piedras Dios es capaz de darle hijos a Abraham.


Síguenos en:

Anuncios


Anuncios


¡Síguenos en WhatsApp! Síguenos