2 Reyes 2:24 - Biblia Nueva Traducción Viviente

²⁴ Eliseo se dio la vuelta, los miró y los maldijo en el nombre del Señor. Entonces dos osos salieron del bosque y atacaron a cuarenta y dos de ellos.

Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

²⁴ Y mirando él atrás, los vio, y los maldijo en el nombre de Jehová. Y salieron dos osos del monte, y despedazaron de ellos a cuarenta y dos muchachos.

Biblia Católica (Latinoamericana)

²⁴ Se volvió y mirándolos los maldijo en nombre de Yavé; salieron del bosque dos osas y desgarraron a cuarenta y dos de esos muchachos.

La Biblia Textual 3a Edicion

²⁴ Y él se volvió para verlos, y los vio y los maldijo en el nombre de YHVH. Y salieron del bosque dos osas que despedazaron a cuarenta y dos de aquellos muchachos.°

Biblia Serafín de Ausejo 1975

²⁴ Se volvió para atrás, los miró y los maldijo en nombre de Yahveh. Y al momento salieron del bosque dos osos y despedazaron a cuarenta y dos de los muchachos.

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

²⁴ Y mirando él atrás, los vio, y los maldijo en el nombre de Jehová. Y salieron dos osas del monte, y despedazaron de ellos a cuarenta y dos muchachos.

Biblia Traducción en Lenguaje Actual

²⁴ Eliseo se dio vuelta y los miró. Luego, con la autoridad que Dios le había dado, les anunció que recibirían su castigo. Enseguida dos osos salieron del bosque y despedazaron a cuarenta y dos de los muchachos.

2 Reyes 2:24 Referencias Cruzadas

Génesis 9:25

Entonces maldijo a Canaán, el hijo de Cam: «¡Maldito sea Canaán! ¡Que sea el más inferior de los siervos para con sus familiares!».

2 Samuel 17:8

Tú conoces a tu padre y a sus hombres; son guerreros poderosos. En este momento están tan enfurecidos como una osa a la que le han robado sus cachorros. Y recuerda que tu padre es un hombre de guerra con experiencia. Él no pasará la noche con las tropas.

1 Reyes 13:24

y el hombre de Dios siguió su camino. Mientras viajaba, le salió al paso un león y lo mató. Su cuerpo quedó tirado en el camino, y tanto el burro como el león estaban junto al cadáver.

1 Reyes 19:17

¡A cualquiera que escape de Hazael, Jehú lo matará; y a los que escapen de Jehú, Eliseo los matará!

1 Reyes 20:36

Entonces el profeta le dijo: «Como no obedeciste la voz del Señor, un león te matará apenas te separes de mí». Cuando el hombre se fue, sucedió que un león lo atacó y lo mató.

2 Reyes 2:25

De allí, Eliseo fue al monte Carmelo y finalmente regresó a Samaria.

Éxodo 20:5

No te inclines ante ellos ni les rindas culto, porque yo, el Señor tu Dios, soy Dios celoso, quien no tolerará que entregues tu corazón a otros dioses. Extiendo los pecados de los padres sobre sus hijos; toda la familia de los que me rechazan queda afectada, hasta los hijos de la tercera y la cuarta generación.

Proverbios 17:12

Es menos peligroso toparse con una osa a la que le han robado sus crías que enfrentar a un necio en plena necedad.

Proverbios 19:29

El castigo está hecho para los burlones, y la espalda de los necios, para recibir golpes.

Proverbios 28:15

Para los pobres, un gobernante malvado es tan peligroso como un león rugiente o un oso a punto de atacar.

Jeremías 28:16

Por lo tanto, esto dice el Señor: “Debes morir. Tu vida terminará este mismo año porque te rebelaste contra el Señor”».

Lamentaciones 3:65

¡Dales corazones duros y tercos, y después, que tu maldición caiga sobre ellos!

Oseas 13:8

Como una osa a quien le robaron sus cachorros, arrancaré tu corazón. Te devoraré como una leona hambrienta y te destrozaré como un animal salvaje.

Levítico 26:22

Enviaré animales salvajes que los privarán de sus hijos y destruirán su ganado. Ustedes disminuirán en número y sus caminos quedarán desiertos.

Amós 7:17

Pero esto es lo que dice el Señor: ‘Tu esposa se convertirá en prostituta en esta ciudad, y a tus hijos y a tus hijas los matarán. Tu tierra será repartida y tú morirás en tierra extranjera. Con toda seguridad el pueblo de Israel irá cautivo al destierro, lejos de su patria’”.

Marcos 11:14

Entonces Jesús dijo al árbol: «¡Que nadie jamás vuelva a comer tu fruto!». Y los discípulos lo oyeron.

Marcos 11:21

Pedro recordó lo que Jesús había dicho al árbol el día anterior y exclamó: —¡Mira, Rabí! ¡La higuera que maldijiste se marchitó y murió!

Hechos 5:5

En cuanto Ananías oyó estas palabras, cayó al suelo y murió. Todos los que se enteraron de lo sucedido quedaron aterrados.

Hechos 5:9

Y Pedro le dijo: —¿Cómo pudieron ustedes dos siquiera pensar en conspirar para poner a prueba al Espíritu del Señor de esta manera? Los jóvenes que enterraron a tu esposo están justo afuera de la puerta, ellos también te sacarán cargando a ti.

Hechos 8:20

Pedro le respondió: —¡Que tu dinero se destruya junto contigo por pensar que es posible comprar el don de Dios!

2 Corintios 10:6

y una vez que ustedes lleguen a ser totalmente obedientes, castigaremos a todo el que siga en desobediencia.

Jueces 9:20

Pero si no han actuado de buena fe, ¡que salga fuego de Abimelec y consuma a los ciudadanos prominentes de Siquem y de Bet-milo, y que salga fuego de los ciudadanos de Siquem y de Bet-milo y consuma a Abimelec!».

Jueces 9:57

Dios también castigó a los hombres de Siquem por toda su maldad. Así se cumplió la maldición de Jotam, hijo de Gedeón.