Biblia Todo Logo
La Biblia Online
- Anuncios -





Éxodo 4:23 - Biblia Spanish Sagradas Escrituras

23 Y yo te he dicho que dejes ir a mi hijo, para que me sirva, mas no has querido dejarlo ir; por tanto , he aquí yo mato a tu hijo, tu primogénito.

Ver Capítulo Copiar


Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

23 Ya te he dicho que dejes ir a mi hijo, para que me sirva, mas no has querido dejarlo ir; he aquí yo voy a matar a tu hijo, tu primogénito.

Ver Capítulo Copiar

Biblia Nueva Traducción Viviente

23 Te ordené: deja salir a mi hijo para que pueda adorarme, pero como te has negado, ¡ahora mataré a tu primer hijo varón!’”».

Ver Capítulo Copiar

Biblia Católica (Latinoamericana)

23 Ya te dije: Deja partir a mi hijo, para que me rinda culto. Pero tú no lo has dejado que salga, y yo voy a quitar la vida a tu hijo primogénito.

Ver Capítulo Copiar

La Biblia Textual 3a Edicion

23 y te digo: Deja ir a mi hijo para que me sirva; pero tú rehusarás dejarlo ir. He aquí Yo voy a matar a tu hijo, tu primogénito.°

Ver Capítulo Copiar

Biblia Serafín de Ausejo 1975

23 Yo te digo: deja salir a mi hijo para que me dé culto; pero como tú te niegas a dejarlo partir, yo mataré a tu hijo, a tu primogénito''.

Ver Capítulo Copiar

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

23 Ya te he dicho que dejes ir a mi hijo, para que me sirva, mas no has querido dejarlo ir: he aquí yo voy a matar a tu hijo, tu primogénito.

Ver Capítulo Copiar




Éxodo 4:23
22 Referencias Cruzadas  

Hirió además a todos los primogénitos en su tierra, el principio de toda su fuerza.


El que hirió los primogénitos de Egipto, desde el hombre hasta la bestia.


Al que hirió a Egipto en sus primogénitos, porque para siempre es su misericordia.


E hirió a todo primogénito en Egipto, las primicias de las fuerzas en las tiendas de Cam.


Entonces vinieron Moisés y Aarón al Faraón, y le dijeron: El SEÑOR Dios de los hebreos, ha dicho así: ¿Hasta cuándo no querrás humillarte delante de mí? Deja ir a mi pueblo para que me sirvan.


Y si aún rehusas dejarlo ir, he aquí que yo traeré mañana langosta en tus términos,


y morirá todo primogénito en tierra de Egipto, desde el primogénito del Faraón que está asentado en su trono, hasta el primogénito de la sierva que está tras la muela; y todo primogénito de las bestias.


Y aconteció que a la medianoche el SEÑOR hirió a todo primogénito en la tierra de Egipto, desde el primogénito del Faraón que estaba sentado sobre su trono, hasta el primogénito del cautivo que estaba en la cárcel, y todo primogénito de los animales.


y endureciéndose el Faraón en no dejarnos ir, el SEÑOR mató en la tierra de Egipto a todo primogénito, desde el primogénito humano hasta el primogénito de la bestia; y por esta causa yo sacrifico al SEÑOR todo primogénito macho, y redimo todo primogénito de mis hijos.


Y Moisés contó a su suegro todas las cosas que el SEÑOR había hecho al Faraón y a los egipcios por causa de Israel, y todo el trabajo que habían pasado en el camino, y cómo los había librado el SEÑOR.


Y oirán tu voz; e irás tú, y los ancianos de Israel, al rey de Egipto, y le diréis: El SEÑOR Dios de los hebreos, nos ha encontrado; por tanto nosotros iremos ahora camino de tres días por el desierto, para que sacrifiquemos al SEÑOR nuestro Dios.


Después de esto Moisés y Aarón entraron al Faraón, y le dijeron: El SEÑOR Dios de Israel, dice así: Deja ir a mi pueblo a celebrarme fiesta en el desierto.


Entra, y habla al Faraón rey de Egipto, que deje ir de su tierra a los hijos de Israel.


y dile: El SEÑOR, el Dios de los hebreos me ha enviado a ti, diciendo: Deja ir a mi pueblo, para que me sirvan en el desierto; y he aquí que hasta ahora no has querido oír.


Entonces el SEÑOR dijo a Moisés: Entra al Faraón, y dile: El SEÑOR ha dicho así: Deja ir a mi pueblo, para que me sirvan.


Entonces el SEÑOR dijo a Moisés: Di a Aarón: Extiende tu vara, y hiere el polvo de la tierra, para que se vuelva piojos por toda la tierra de Egipto.


Y ellos lo hicieron así; y Aarón extendió su mano con su vara, e hirió el polvo de la tierra, el cual se volvió piojos, así en los hombres como en las bestias; todo el polvo de la tierra se volvió piojos en toda la tierra de Egipto.


Y el SEÑOR dijo a Moisés: Levántate de mañana y ponte delante del Faraón, he aquí él sale a las aguas; y dile: El SEÑOR ha dicho así: Deja ir a mi pueblo, para que me sirva.


Entonces el SEÑOR dijo a Moisés: Entra al Faraón, y dile: El SEÑOR Dios de los hebreos, dice así: Deja ir a mi pueblo, para que me sirvan;


Entonces el SEÑOR dijo a Moisés: Levántate de mañana, y ponte delante del Faraón, y dile: El SEÑOR Dios de los hebreos, dice así: Deja ir a mi pueblo, para que me sirva.


porque si no lo quieres dejar ir, y los detuvieres aún,


Cuando Israel era muchacho, yo lo amé, y de Egipto llamé a mi hijo.


Síguenos en:

Anuncios


Anuncios


¡Síguenos en WhatsApp! Síguenos