Los arameos del este y los filisteos del oeste han devorado con avidez a Israel. En todo esto sigue enojado y su mano sigue levantada.
Lucas 11:53 - Versión Biblia Libre Cuando Jesús se iba, los maestros religiosos y los Fariseos comenzaron a atacarlo duramente, haciéndole preguntas para provocarlo. Más versionesBiblia Reina Valera 1960 Diciéndoles él estas cosas, los escribas y los fariseos comenzaron a estrecharle en gran manera, y a provocarle a que hablase de muchas cosas; Biblia Nueva Traducción Viviente Mientras Jesús se retiraba, los maestros de la ley religiosa y los fariseos se pusieron agresivos y trataron de provocarlo con muchas preguntas. Biblia Católica (Latinoamericana) Cuando salió de allí, los maestros de la Ley y los fariseos comenzaron a hostigarlo muy duramente. La Biblia Textual 3a Edicion Cuando Él salió° de allí, los escribas y los fariseos comenzaron a hostigarlo en gran manera y a provocarlo con preguntas acerca de muchas cosas, Biblia Serafín de Ausejo 1975 Cuando salió de allí, los escribas y fariseos comenzaron a acosarlo habilidosamente sobre múltiples cuestiones, Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y diciéndoles estas cosas, los escribas y los fariseos comenzaron a acosarle en gran manera, para provocarle a que hablase de muchas cosas; |
Los arameos del este y los filisteos del oeste han devorado con avidez a Israel. En todo esto sigue enojado y su mano sigue levantada.
Algunos decidieron: “Necesitamos un plan para lidiar con Jeremías. Todavía habrá sacerdotes para explicar la ley, todavía habrá sabios para dar consejos, y todavía habrá profetas para dar profecías. Organicemos una campaña de desprestigio contra él para no tener que escuchar una palabra de lo que dice”.
He oído a mucha gente murmurar: “¡Él es el que dice que el terror está en todas partes! ¡Hay que denunciarle! Denunciar lo que hace!” Todos mis buenos amigos están esperando que cometa un error. “Tal vez cometa un error para que podamos derrotarlo y vengarnos de él”, dicen.
¡Qué lástima me dan ustedes! Pues le han quitado a la gente la llave de las puertas del conocimiento. Ni ustedes entraron, ni permitieron que otros entraran”.
Ellos esperaban atraparlo, tratando de que él dijera algo que pudieran usar contra él.
Así que esperando la oportunidad, enviaron espías que se hicieron pasar por hombres sinceros. Ellos trataban de sorprender a Jesús diciendo algo que les permitiera entregarlo al poder y autoridad del gobernador.
Entonces vinieron unos Saduceos, quienes no creen en la resurrección, y le hicieron a Jesús la siguiente pregunta:
“Anteriormente estaba convencido con sinceridad de que debía ser todo lo posible para oponerme al nombre de Jesús de Nazaret.
El amor no actúa de manera inapropiada ni insiste en salirse con la suya. El amor no es contencioso ni guarda registro de los errores.
Así que hemos animado a Tito—ya que él fue quien inició esta obra con ustedes—para que regrese y termine con ustedes este ministerio de gracia.