Este es mi acuerdo contigo y con tus descendientes, el acuerdo que debes guardar: Todo hombre entre ustedes será circuncidado.
Lucas 1:13 - Versión Biblia Libre Pero el ángel le dijo: “No tengas miedo, Zacarías. Tu oración ha sido escuchada, y tu esposa Isabel concebirá de ti un hijo, y le llamarás Juan. Más versionesBiblia Reina Valera 1960 Pero el ángel le dijo: Zacarías, no temas; porque tu oración ha sido oída, y tu mujer Elisabet te dará a luz un hijo, y llamarás su nombre Juan. Biblia Nueva Traducción Viviente pero el ángel le dijo: —¡No tengas miedo, Zacarías! Dios ha oído tu oración. Tu esposa, Elisabet, te dará un hijo, y lo llamarás Juan. Biblia Católica (Latinoamericana) Pero el ángel le dijo: 'No temas, Zacarías, porque tu oración ha sido escuchada. Tu esposa Isabel te dará un hijo y le pondrás por nombre Juan. La Biblia Textual 3a Edicion Pero el ángel le dijo: No temas, Zacarías, porque fue oída tu oración, y tu mujer Elisabet te dará a luz un hijo, y llamarás su nombre Juan. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Pero el ángel le dijo: 'No temas, Zacarías; que tu oración ha sido escuchada: tu esposa Isabel te dará un hijo, al que llamarás Juan. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Mas el ángel le dijo: Zacarías, no temas; porque tu oración ha sido oída, y tu esposa Elisabet te dará a luz un hijo, y llamarás su nombre Juan. |
Este es mi acuerdo contigo y con tus descendientes, el acuerdo que debes guardar: Todo hombre entre ustedes será circuncidado.
“¡No, será tu esposa Sara quien te dará un hijo!” respondió Dios. “Lo llamarás Isaac. Yo guardaré mi pacto con él y con sus descendientes como un pacto eterno.
¿Acaso hay algo difícil para el Señor? Volveré el próximo año durante la primavera, tal como te lo dije, y para entonces Sara tendrá un hijo”.
Isaac oró al Señor pidiendo su ayuda en favor de su esposa porque no podía tener hijos. El Señor respondió su oración y ella quedó embarazada.
Entonces me acosté con mi mujer la profetisa, y quedó embarazada y dio a luz un hijo. El Señor me dijo: “Llámalo Maher Salal Jas Baz.
“No tengas miedo, Daniel”, me dijo. “Desde el primer día en que te concentraste en tratar de entender esto, y en humillarte ante Dios, tu oración fue escuchada, y yo he venido a responderte.
Entonces el Señor le dijo a Oseas: “Ponle por nombre Jezreel, porque yo castigaré la casa de Jehú por la sangre que derramó sobre Jezreel; y yo pondré fin al reino de Israel.
Gómer volvió a quedar embarazada y esta vez tuvo una hija. El Señor le dijo entonces a Oseas: “Ponle por nombre Lo-ruhama, porque no amaré más a la casa de Israel y de seguro no los perdonaré.
Ella tendrá un hijo y tú le llamarás Jesús, porque él salvará a su pueblo de sus pecados”.
Pero inmediatamente Jesús les dijo: “¡No se preocupen, soy yo! ¡No tengan miedo!”
El ángel dijo a las mujeres: “¡No tengan miedo! Yo sé que ustedes buscan a Jesús, el que fue crucificado.
“No tengan miedo”, les dijo. “Ustedes buscan a Jesús el Nazareno, el que fue crucificado. Él se ha levantado de entre los muertos. No está aquí.
“No te preocupes, María”, siguió diciendo el ángel, “pues Dios te ha mostrado su gracia.
Después de ocho días, llegó el momento de circuncidar al niño, y fue llamado Jesús. Este fue el nombre dado por el ángel incluso antes de ser concebido.
Y me dijo: ‘Cornelio, tus oraciones han sido escuchadas, y Dios ha reconocido tu generosidad para con los pobres.
Y el Señor bendijo a Ana con tres hijos y dos hijas. El niño Samuel creció en la presencia del Señor.