Proporciónanos dos bueyes. Que los profetas de Baal escojan el que quieran, y que lo corten en pedazos y lo pongan sobre la leña. Pero no le prendan fuego. Yo prepararé el otro buey y lo pondré sobre la leña, pero no le prenderé fuego.
Levítico 1:8 - Versión Biblia Libre Entonces los sacerdotes colocarán cuidadosamente las piezas, incluyendo la cabeza y la grasa, en la madera que se quema sobre el altar. Más versionesBiblia Reina Valera 1960 Luego los sacerdotes hijos de Aarón acomodarán las piezas, la cabeza y la grosura de los intestinos, sobre la leña que está sobre el fuego que habrá encima del altar; Biblia Nueva Traducción Viviente y acomodarán los pedazos de la ofrenda, junto con la cabeza y la grasa, sobre la leña que arde en el altar. Biblia Católica (Latinoamericana) acomodarán los trozos con la cabeza y las grasas encima de la leña colocada sobre el fuego del altar. La Biblia Textual 3a Edicion Seguidamente, los mismos hijos de Aarón, los sacerdotes, dispondrán los trozos, la cabeza y la grasa sobre la leña que está encima del fuego del altar, Biblia Serafín de Ausejo 1975 Después, los hijos de Aarón, los sacerdotes, dispondrán los trozos, con la cabeza y la grasa, sobre la leña colocada encima del fuego del altar. El oferente Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y los sacerdotes, hijos de Aarón, acomodarán las piezas, la cabeza y el redaño, sobre la leña que está en el fuego, que está sobre del altar: |
Proporciónanos dos bueyes. Que los profetas de Baal escojan el que quieran, y que lo corten en pedazos y lo pongan sobre la leña. Pero no le prendan fuego. Yo prepararé el otro buey y lo pondré sobre la leña, pero no le prenderé fuego.
Colocó la madera en su lugar, cortó el buey en pedazos y lo puso sobre la madera. Luego les dijo: “Llenen de agua cuatro tinajas grandes y viértanla sobre la ofrenda y la madera”.
En las paredes del interior de la sala se colocaban ganchos del ancho de una mano. Sobre estas mesas se colocaba la carne de la ofrenda.
Entonces lo cortarás en pedazos, y el sacerdote colocará cuidadosamente los pedazos, incluyendo la cabeza y la grasa, en la madera que se quema sobre el altar.
De la ofrenda de paz debes traer una ofrenda de comida al Señor: toda la grasa que cubre las entrañas,
ambos riñones con la grasa en ellos por los lomos, y la mejor parte del hígado, que debes quitar junto con los riñones.