Los Fariseos respondieron: “¡Tú no puedes ser tu propio testigo! ¡Lo que dices no prueba nada!”
Entonces los fariseos le dijeron: Tú das testimonio acerca de ti mismo; tu testimonio no es verdadero.
Los fariseos respondieron: —¡Tú haces esas declaraciones acerca de ti mismo! Un testimonio así no es válido.
Los fariseos replicaron: 'Estás hablando en tu propio favor; tu testimonio no vale nada.
Le dijeron, pues, los fariseos: Tú das testimonio acerca de ti mismo; tu testimonio no es verdadero.°
Le replicaron los fariseos: 'Tú das testimonio de ti mismo: tu testimonio no es válido'.
Entonces los fariseos le dijeron: Tú das testimonio de ti mismo; tu testimonio no es verdadero.
Le pusieron una venda en los ojos, y le preguntaban: “¡Si puedes profetizar, dinos quién te golpeó esta vez!”