Perdona a tu pueblo que ha pecado contra ti, todos los actos de rebeldía que ha cometido contra ti. Haz que quienes los han capturado se apiaden de ellos.
Éxodo 2:6 - Versión Biblia Libre Al abrirla, vio al niño que lloraba y sintió pesar por él. “Este debe ser uno de los niños hebreos”, dijo. Más versionesBiblia Reina Valera 1960 Y cuando la abrió, vio al niño; y he aquí que el niño lloraba. Y teniendo compasión de él, dijo: De los niños de los hebreos es este. Biblia Nueva Traducción Viviente Al abrir la canasta la princesa vio al bebé. El niño lloraba, y ella sintió lástima por él. «Seguramente es un niño hebreo», dijo. Biblia Católica (Latinoamericana) Lo abrió y vio que era un niño que lloraba. Se compadeció de él y exclamó: '¡Es un niño de los hebreos!' La Biblia Textual 3a Edicion Cuando la abrió vio al niño, y he aquí era un niñito que lloraba; y tuvo compasión de él, y exclamó: ¡Éste es uno de los niños de los hebreos! Biblia Serafín de Ausejo 1975 Al abrirla, vio que en ella había un niño y que el pequeñín lloraba. Compadecida de él, dijo: 'Es un niño de los hebreos'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y cuando la abrió, vio al niño; y he aquí que el niño lloraba. Y teniendo compasión de él, dijo: De los niños de los hebreos es este. |
Perdona a tu pueblo que ha pecado contra ti, todos los actos de rebeldía que ha cometido contra ti. Haz que quienes los han capturado se apiaden de ellos.
Señor, por favor responde a mi oración y a las oraciones de los que aman adorarte. Por favor, permíteme tener éxito hoy y haz que el rey simpatice conmigo’”. Yo era el copero del rey.
Hizo que los pueblos que los habían capturado los trataran con misericordia.
Entonces el Faraón emitió esta orden a todo su pueblo: “Arrojen al Nilo a todo niño hebreo que nazca, y por el contrario, dejen vivir a las niñas”.
Entonces la hija del Faraón llegó para bañarse en el Nilo. Sus criadas caminaban por la orilla del río, y cuando ella vio la cesta entre los juncos, envió a su criada a buscarla y traérsela.
Entoncesla hermana del niño le preguntó a la hija del Faraón: “¿Desea que vaya a buscar a una de las mujeres hebreas para que lo cuide por usted?”
El Señor dirige las decisiones del rey como si fuera una corriente de agua, enviándola en la dirección que él quiere.
Esto significaba que todo propietario de esclavos debía liberar a sus esclavos hebreos, tanto hombres como mujeres. Nadie debía obligar a sus conciudadanos a seguir siendo esclavos.
Cuando llegó el momento de ser abandonado, la hija del Faraón lo rescató y cuidó de él como su propio hijo.
Finalmente, tengan todos un mismo propósito. Sean amables y amorosos unos con otros. Sean compasivos y humildes.