Pero Joab le respondió al rey: “¡Que el Señor multiplique su pueblo cien veces, Su Majestad, y que usted viva para verlo! Pero, ¿por qué quiere hacer esto Su Majestad?”
2 Samuel 24:4 - Versión Biblia Libre Pero el rey se mostró inflexible, así que Joab y los comandantes del ejército dejaron al rey y fueron a censar al pueblo de Israel. Más versionesBiblia Reina Valera 1960 Pero la palabra del rey prevaleció sobre Joab y sobre los capitanes del ejército. Salió, pues, Joab, con los capitanes del ejército, de delante del rey, para hacer el censo del pueblo de Israel. Biblia Nueva Traducción Viviente Sin embargo, el rey insistió en que levantaran el censo, así que Joab y los comandantes del ejército salieron y contaron al pueblo de Israel. Biblia Católica (Latinoamericana) Pero como la palabra del rey era una orden para Joab y los jefes del ejército, salió de la casa del rey junto con los jefes del ejército para ir a hacer el censo de la población de Israel. La Biblia Textual 3a Edicion Pero la palabra del rey prevaleció contra Joab y contra los jefes del ejército. Así que Joab y los jefes del ejército salieron de la presencia del rey para hacer el censo del pueblo de Israel. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Con todo, la orden del rey prevaleció sobre Joab y sobre los jefes del ejército. Salió, pues, Joab con los jefes de la presencia del rey para hacer el censo del pueblo de Israel. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Pero la palabra del rey pudo más que Joab, y que los capitanes del ejército. Salió, pues, Joab, con los capitanes del ejército, de delante del rey, para contar el pueblo de Israel. |
Pero Joab le respondió al rey: “¡Que el Señor multiplique su pueblo cien veces, Su Majestad, y que usted viva para verlo! Pero, ¿por qué quiere hacer esto Su Majestad?”
Cruzaron el Jordán y acamparon al sur de la ciudad de Aroer, en medio del valle, y luego siguieron hacia Gad y Jazer.
Pero el rey se mostró inflexible, así que Joab se marchó y recorrió todo Israel. Finalmente regresó a Jerusalén,
Pero como las parteras respetaban a Dios, no hicieron lo que el rey de Egipto les había ordenado, sinoque dejaban vivir a los niños también.
“Cuando hagas un censo de los israelitas, cada hombre debe pagarle al Señor el rescate por su vida cuando sea contado. Así no sufrirán la plaga cuando sean contados.
Las órdenes del rey tienen autoridad suprema; ¿quién va a cuestionarle diciendo: “Qué haces”?
Pero Pedro y los apóstoles respondieron: “Necesitamos obedecer a Dios antes que a los hombres.